Como saben todos, este sitio es enemigo acérrimo de la religiosidad. Simplemente, porque promueve la indolencia y porque es una herramienta política para controlar a la masa (rebaño). No es intención de este sitio, como nos pidera Carl Sagan, el herir sentimientos, pero sí queremos estar en lo académicamente correcto. Es inevtitable el no emocionarse al ver a Ingrid Betancourt liberada y comenzar a planear una Colombia libre y una América Latina próspera, una vez derrotada la violencia marxista, pero puede sentirse como una bofetada en la cara que Ingrid agradezca a "Dios" su libertad, se arrodille y dé gracias a alguna imagen virgen, acompañada de un funcionario de la iglesia de Roma. A Ingrid Betancourt se le liberó gracias a la acción coordinada del presidente Uribe con muchos elementos nacionales y extranjeros. ¿Cómo es posible que le agradezca a algún creador del universo?
Es esencial respetar las creencias individuales, es uno de los axiomas del liberalismo. Sí molesta la actitud de algunos medios chilenos en destacar la religiosidad de Ingrid.
Es ridículo pensar no sólo que existe un ser omnipotente y omnisciente, más encima bondadoso, que permite una guerra civil en Colombia, y que permite que a Ingrid la secuestren, y que tarda 6 años en responder a las plegarias. O dios no es omnisciente, o no es todopoderoso, o simplemente es un sádico. Lo más seguro es que no exista.
Ingrid Betancourt ha vivido una situación límite, y eso es, a diferencia de los medios chilenos, lo que destaca la prensa francesa. La opinión pública francesa, ferozmente laica, no podría creer que Ingrid Betancourt agradeciera a dios por su liberación. En el artículo Le retour sur scène d'une combattante politique de Le Figaro un siquiatra nos explica lo que realmente ha ocurrido. Ante las primeras expresiones de Ingrid, «Accompagnez-moi d'abord pour remercier Dieu et la Vierge.» y «Mon Dieu, c'est un miracle», se nos explica lo siguiente
O sea, que Ingrid agradezca a dios y virgen es lo que el siquiatra llama "factores de resiliencia". Desde luego, como dice Gérard Lopez, nadie puede comprender que en una situación de abandono y peligro, dios entregue una protección salvadora. Sus declaraciones sobre dios y la virgen tienen una connotación crística.
Por supuesto, no podemos negar que la religión cumple un papel muy importante, es un "factor de resiliencia", como ya nos explicó el siquiatra francés. Es importante destacar que en ningún caso acá se admira la profunda fe crística de Ingrid. Sus desconcertantes declaraciones inmediatamente después de su liberación responden a aquellas creencias que le ayudaron a enfrentar su cautiverio. La intensidad de sus creencias no convierten a su fe en verdad, ni hacen que dios exista. Por mucho que yo me ponga de rodillas, no voy a lograr que una virgen de a luz un hijo, menos aún podremos creer que ese hijo era el hijo de dios, ni menos aún podemos creer que un dos exista. Por mucho que yo alabe al Chanchito Volador, el chanchito no existirá salvo en mi mente.
El artículo de Le Figaro corresponde a la mentalidad racionalista de la prensa francesa. No hay lugar para emociones de la calaña cebollera que tanto gustan en el contiente del realismo mágico. La mujer que más ha acaparado la atención de la sociedad francesa ha sido liberada de su cautiverio, y se pone de rodillas: preguntémosle a un siquiatra cuál es su diagnóstico.
La verdad sea dicha, este acontecimiento no fue el más cubierto, se hizo vista gorda y se le ha considerado más bien un exabrupto.
Hasta el límite
La fe, o sea, el creer en algo sin evidencia, puede llegar a ser conmovedora. La actitud de un ateo debe ser firme, pero no por ello podemos dejar de comentar este fenómeno.
A continuación les presento una escena extraordinaria de la película "El hombre elefante". John Merrick fue un niño inglés de la época victoriana que nació con deformidades tan serias que su madre lo abandonó y lo vendió a un circo. Su vida transcurrió tal como la de un monstruo de feria. Finalmente fue rescatado por el doctor Treeves (Anthony Hopkins) quien buscaba notoriedad con sus pares científicos y quiso alojar al Hombre Elefante en el Hospital de Londres. Para ello debía convencer al director del recinto de que Merrick era sólo deforme y que sus capacidades mentales eran normales, y por ello no debía irse a un centro siquiátrico.
Hopkins esperaba que su propia teoría no fuera cierta. Sabía del sufrimiento del Hombre Elefante, y por su propio bien esperaba que sólo repitiese las respuestas que había preparado con él para una entrevista con el director del hospital. Enorme fue la sorpresa de Hopkins al darse cuenta que las capacidades mentales de Merrick estaban intactas, y de hecho recita el Salmo 23. Toda una vida viviendo como bestia en un circo, y todo ello había sido experimentado con lucidez por el Hombre Elefante. Esta es una de las escenas más conmovedoras de una de las películas más profundamente humanas y desgarradoras de la historia del cine.
Si la fe sirve a alguien para resistir y continuar con su vida, es una cuestión que se merece respeto. Si la fe organizada y convertida en religión recibe el estatus de verdad eterna, y se instrumentaliza con fines políticos, es algo que no merece respeto.
Es esencial respetar las creencias individuales, es uno de los axiomas del liberalismo. Sí molesta la actitud de algunos medios chilenos en destacar la religiosidad de Ingrid.
Es ridículo pensar no sólo que existe un ser omnipotente y omnisciente, más encima bondadoso, que permite una guerra civil en Colombia, y que permite que a Ingrid la secuestren, y que tarda 6 años en responder a las plegarias. O dios no es omnisciente, o no es todopoderoso, o simplemente es un sádico. Lo más seguro es que no exista.
Ingrid Betancourt ha vivido una situación límite, y eso es, a diferencia de los medios chilenos, lo que destaca la prensa francesa. La opinión pública francesa, ferozmente laica, no podría creer que Ingrid Betancourt agradeciera a dios por su liberación. En el artículo Le retour sur scène d'une combattante politique de Le Figaro un siquiatra nos explica lo que realmente ha ocurrido. Ante las primeras expresiones de Ingrid, «Accompagnez-moi d'abord pour remercier Dieu et la Vierge.» y «Mon Dieu, c'est un miracle», se nos explica lo siguiente
"Le psychiatre Gérard Lopez parle de «facteurs résilients». Chacun peut comprendre que dans des situations d'abandon et de danger, Dieu apporte une protection salvatrice. La foi d'Ingrid, qui a toujours été catholique pratiquante, n'a pu que grandir pendant sa captivité. Ses premiers propos ont parfois des accents christiques, notamment quand elle se fixe comme mission d'«ouvrir le chemin de la paix» aux hommes et femmes demeurés otages."
O sea, que Ingrid agradezca a dios y virgen es lo que el siquiatra llama "factores de resiliencia". Desde luego, como dice Gérard Lopez, nadie puede comprender que en una situación de abandono y peligro, dios entregue una protección salvadora. Sus declaraciones sobre dios y la virgen tienen una connotación crística.
Por supuesto, no podemos negar que la religión cumple un papel muy importante, es un "factor de resiliencia", como ya nos explicó el siquiatra francés. Es importante destacar que en ningún caso acá se admira la profunda fe crística de Ingrid. Sus desconcertantes declaraciones inmediatamente después de su liberación responden a aquellas creencias que le ayudaron a enfrentar su cautiverio. La intensidad de sus creencias no convierten a su fe en verdad, ni hacen que dios exista. Por mucho que yo me ponga de rodillas, no voy a lograr que una virgen de a luz un hijo, menos aún podremos creer que ese hijo era el hijo de dios, ni menos aún podemos creer que un dos exista. Por mucho que yo alabe al Chanchito Volador, el chanchito no existirá salvo en mi mente.
El artículo de Le Figaro corresponde a la mentalidad racionalista de la prensa francesa. No hay lugar para emociones de la calaña cebollera que tanto gustan en el contiente del realismo mágico. La mujer que más ha acaparado la atención de la sociedad francesa ha sido liberada de su cautiverio, y se pone de rodillas: preguntémosle a un siquiatra cuál es su diagnóstico.
La verdad sea dicha, este acontecimiento no fue el más cubierto, se hizo vista gorda y se le ha considerado más bien un exabrupto.
Hasta el límite
La fe, o sea, el creer en algo sin evidencia, puede llegar a ser conmovedora. La actitud de un ateo debe ser firme, pero no por ello podemos dejar de comentar este fenómeno.
A continuación les presento una escena extraordinaria de la película "El hombre elefante". John Merrick fue un niño inglés de la época victoriana que nació con deformidades tan serias que su madre lo abandonó y lo vendió a un circo. Su vida transcurrió tal como la de un monstruo de feria. Finalmente fue rescatado por el doctor Treeves (Anthony Hopkins) quien buscaba notoriedad con sus pares científicos y quiso alojar al Hombre Elefante en el Hospital de Londres. Para ello debía convencer al director del recinto de que Merrick era sólo deforme y que sus capacidades mentales eran normales, y por ello no debía irse a un centro siquiátrico.
Hopkins esperaba que su propia teoría no fuera cierta. Sabía del sufrimiento del Hombre Elefante, y por su propio bien esperaba que sólo repitiese las respuestas que había preparado con él para una entrevista con el director del hospital. Enorme fue la sorpresa de Hopkins al darse cuenta que las capacidades mentales de Merrick estaban intactas, y de hecho recita el Salmo 23. Toda una vida viviendo como bestia en un circo, y todo ello había sido experimentado con lucidez por el Hombre Elefante. Esta es una de las escenas más conmovedoras de una de las películas más profundamente humanas y desgarradoras de la historia del cine.
Si la fe sirve a alguien para resistir y continuar con su vida, es una cuestión que se merece respeto. Si la fe organizada y convertida en religión recibe el estatus de verdad eterna, y se instrumentaliza con fines políticos, es algo que no merece respeto.
"El hombre elefante", Entrevista en el hospital (Salmo 23)
Salmos 23
Salmo de David.
1 El Señor es mi pastor, nada me falta;2 en verdes pastos me hace descansar.
Junto a tranquilas aguas me conduce;
3 me infunde nuevas fuerzas.
Me guía por sendas de justicia
por amor a su nombre.
4 Aun si voy por valles tenebrosos,
no temo peligro alguno
porque tú estás a mi lado;
tu vara de pastor me reconforta.
5 Dispones ante mí un banquete
en presencia de mis enemigos.
Has ungido con perfume mi cabeza;
has llenado mi copa a rebosar.
6 La bondad y el amor me seguirán
todos los días de mi vida;
y en la casa del Señor
habitaré para siempre.
Palabras bellas, sin duda. Pero "el Señor" no existe.
3 comentarios:
Hola Chile Liberal, felicitaciones por tus excelentes artículos.
Quiero comentar acerca la foto de Ingrid Betancourt que agregaste a la página, en la parte superior.
Pienso que la razón de que esta ahí (al lado de grandes personajes y procesos de la historia) es simplemente debido al júbilo de su liberación. Esto se debe a que su imagen se ha transformado en un icono debido a la fuerza que demostró para soportar 6 años en cautiverio. Ella esta siendo identificada con el fin de los grupos de izquierda revolucionarios armados. El fin de ideologías y grupos que causaron un daño enorme en Sudamérica.
Betancourt inicio sus pasos en política en el Partido Liberal de Colombia (perteneciente a la internacional socialista). Luego de percatarse de la corrupción, el poder del narcotráfico en su partido y la política, renuncia y posteriormente crea un nuevo referente político. El Partido Político Verde Oxigeno, de tendencia claramente centro izquierdista. Durante su compaña presidencial, su principal adversario era Uribe. En su programa de gobierno del 2002 había medidas tales como una nueva reforma agraria, fijación de precios en productos y servicios claves, una fuerte educación centralizada y estatal, etc. Estaba en contra de una preocupación excesiva de la inflación y el gasto fiscal. Estaba a favor de un aumento de la demanda por medio de intervención estatal. Por otra parte, su postura frente a las FARC era la negociación, intercambio de prisioneros, un dialogo distendido sin asumir la gravedad de la situación y no reconocerlos como unos delincuentes y terroristas (postura compartida por Chávez, Castro, Correa, Los Kirchner, PC Chileno y otros idiotas latinoamericanos e izquierdistas mundiales).
Mi humilde opinión, como fiel lector de este blog, es que claramente no se merece compartir imagen con la Revolución Francesa y todo lo que representa, Jhon Locke y John Stuart Mill (supongo que son ellos) o la lucha del voto femenino.
Si alguien se merece homenajes y todo tipo de halagos es Álvaro Uribe.
Les dejo el programa de gobierno de Betancourt, es lo que encontré, creo que omite muchas cosas. Si pudieran ver declaraciones u opiniones de ella en la campaña electoral podrían tener una idea mas profunda sobre sus principios (lamentablemente no encontre y no tengo mucho tiempo).
http://www.greens.org/ingrid/programa.htm
También les agrego dos comentarios de Karin Ebensperger, creo que son un aporte en este tema.
http://blogs.elmercurio.com/columnasycartas/2008/03/14/todos-podriamos-ser-ingrid-bet.asp
http://blogs.elmercurio.com/columnasycartas/2008/07/04/todos-podriamos-ser-ingrid-bet-1.asp?Ant=1
@Raúl: correcto, la foto está ahí en la cabecera para exaltar el rescate de esta mujer, y que ojalá signifique el comienzo del fin de la guerrilla.
En cuanto a la figura política de Ingrid Betancourt, ella se merece máxima atención. Esto puede parecer confuso ya que claramente estamos en desacuerdo con ella y sus posturas políticas. Pero Raúl, así como Voltaire decía "estoy en completo desacuerdo con lo que dices, pero respeto a muerte tu derecho a decirlo", también debemos decir que estamos en diametral desacuerdo con Ingrid, pero simplemente no podemos permitir que una candidata presidencial sea secuestrada, encadenada a un árbol y separada de sus hijos. Las diferencias con Ingrid pueden ser enormes, lo son, pero deben debetirse y combatirse en un contexto de un debate presidencial, con lealtad y respeto. Lo que a elle le ha ocurrido, a pesar de ser una adversaria política, es simplemente inaceptable. O sea, "respeto a muerte su derecho a decirlo".
No por ser "Verde" o excesivamente tolerante a las FARC vamos a hacer vista gorda a su sufrimiento. Sí, es cierto que ella fue a hacer campaña a una zona que no debía y desobedeció, siendo irresponsable. También es cierto que su campaña era "marginal" y sus posibilidades de ganar eran nulas. Ella se presentó en una plataforma anticorrupción y me alegra que así sea.
Espero que no ocurra, pero imagínate por un segundo que alguien secuestrase a Insulza o Piñera o Lavín, o a Lagos o algún otro. No por estar a favor o en contra voy a dejar de luchar por su libertad.
Lo que dices es correcto: "Si alguien se merece homenajes y todo tipo de halagos es Álvaro Uribe". Pero ya habrá tiempo para ello, y me parece que ese blog aún tiene mucho que escribir sobre él. Sin duda que el caso Betancourt servirá para que Uribe se alce como el nuevo líder de América Latina y así eclipse a los Hugos, Evos y Correas que pululan por ahí.
Ya habrá tiempo de elogiar al presidente Uribe, sin duda una figura determinante en el panorama internacional, y un tipo que se ha ganado la admiración del mundo.
Gracias por el aporte, Raúl.
(Nota aparte: las ilustraciones son, de izquierda a derecha:
1. "La Libertad guía al pueblo" (Delacroix)
2. Declaración Universal de los derechos del hombre y el ciudadano, 3. Primeras demostraciones por el voto femenino
4. Padres Fundadores trabajando en la redacción de la Constitución Americana
5. Adam Smith
6. John Stuart Mill)
"O dios no es omnisciente, o no es todopoderoso, o simplemente es un sádico. Lo más seguro es que no exista".
Notable frase, a riesgo de quedar por chanta en un curso teológico (obligatorio) en mi (p)u(c)niversidad vimos que varios autores plateaban algo similar y creo estas líneas tienen un gran parecido a lo dicho por Sabato.
Voy a echarle un ojo y dar las citas "como Dios manda" XD
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