viernes, 30 de marzo de 2007

¿Y qué le pasó a la sonrisa?

El día de ayer fue el más negro que el Chile democrático ha visto y ha marcado el comienzo del fin de la Concertación.

Las autoridades, encabezadas por la misma presidenta, han finalmente reconocido el fracaso rotundo, absoluto e inapelable del fiasco de Transantiago. Se suma la continuación de las protestas escolares, más el descontento de los propios trabajadores del sistema de buses, sin olvidar que la ex amante de un extremista, Michelle Bachelet Jería, ha visto como los focos de violencia se han volcado en su contra. Belisario Velasco sigue en su cargo, demostrando la misma incompetencia que lució antes como subsecretario. Inaceptable que no haya sido apartado de su cargo, junto al poco hábil Lagos Weber. Es decir, aún no hay un gabinete confiable.

Presidenta, échelos.

Ideas absurdas como la paridad y el gobierno ciudadano llegaron a su fin, pero la persistente ineptitud para designar un equipo de trabajo son la muestra innegable y tangible de la poca competencia de la jefa de gobierno, mientras que la guinda de la torta es la baja del crecimiento de 5.7% en 2005 a 4% con Bachelet. Brindamos el beneficio de la duda al equipo económico encabezado por Andrés Velasco.

La violencia se desató ayer por varias horas y el cese de la producción económica nacional, más las constantes pérdidas producidas por el Transantiago (sin que se divise solución pronta), llevan a Chile Liberal a concluir que el 29 de marzo de 2007 fue el día que se le borró la sonrisa a Michelle Bachelet.

miércoles, 28 de marzo de 2007

Es una bendición que la izquierda haya abrazado la ciencia económica

REPRODUCIMOS UNA ENTREVISTA DE EL PAÍS (ESPAÑA) A ARNOLD HARBERGER, ECONOMISTA Y CREADOR DE LA "ESCUELA DE CHICAGO". LA PREGUNTA FINAL ES PARTICULARMENTE INTERESANTE.

A Arnold Harberger se le atribuye la paternidad de los Chicago Boys, el grupo de economistas que implantó el modelo neoliberal en Chile durante la dictadura de Augusto Pinochet. Creador junto a Milton Friedman de la escuela de economía de Chicago, por las aulas de este viejo profesor han pasado más de 30 ministros de Economía y 12 gobernadores de bancos centrales, principalmente latinoamericanos. Harberger (Newark, Nueva Jersey, 1924) ocupa ahora la cátedra de Economía en la Universidad de California en Los Ángeles (UCLA), y ha visitado Madrid para participar en un homenaje a Friedman organizado por FAES y dar una conferencia en la Fundación Rafael del Pino, en cuya sede conversó ayer con EL PAÍS.

¿Ha seguido de cerca el viaje del presidente Bush por América Latina? ¿Qué le parece el acuerdo con Brasil para desarrollar el etanol?
De vez en cuando, los Gobiernos de EE UU hacen un esfuerzo para reforzar los vínculos con Latinoamérica. Creo que la política estadounidense en la zona no ha sido tan negligente como a veces se lee en la prensa. Así lo demuestra el tratado de libre comercio con Chile y las negociaciones con Colombia y Paraguay. Lo del etanol es un asunto que permite a Bush estar más en armonía con las corrientes de pensamiento del resto del mundo, y además tiene mucha aceptación en EE UU, especialmente entre los granjeros del Medio Oeste.

La mayoría de los países latinoamericanos han entrado en una senda de estabilidad económica tras años de turbulencias. Algunos Gobiernos han aplicado políticas de mercado como las que usted preconiza, pero Venezuela y Bolivia parecen haber elegido un camino muy diferente.
Creo que tarde o temprano van a tener que reaprender las lecciones de la futilidad de ese tipo de populismo. Quien afirme que las políticas que se están siguiendo benefician económicamente a sus países tiene que demostrármelo. Chávez tiene la suerte de gozar del petróleo a 60-70 dólares el barril, pero no está nutriendo el sistema productivo de Venezuela, no está estimulando la inversión en la futura productividad de su país. En lugar de eso, está regalando petrodólares a todo el mundo, tratando de comprar su aceptación. Cada dólar que va a otros países de Latinoamérica es un dólar que podría gastarlo en subir el nivel de vida de los venezolanos.
¿Pero no cree que los Gobiernos de Chávez y Morales son resultado del fracaso de políticas económicas demasiado estrictas impuestas desde Washington?
Quién sabe. He trabajado mucho con el Fondo Monetario Internacional, y una de las cosas que hicimos fue estudiar la trayectoria de los países antes y después de firmar un acuerdo con el Fondo. Resulta que, en la gran mayoría de los casos, la tasa de crecimiento fue mayor que el año anterior y que el promedio de los 10 años anteriores. También estudiamos si los gastos sociales se habían contraído mucho como consecuencia de los acuerdos con el FMI, y no se contrajeron. Es natural que haya ciertos grupos en cada país que tengan en mente financiar los déficit sin dolor, y frente a esa alternativa el Fondo es estricto. Pero los economistas del Fondo son buenos y el funcionamiento del organismo ha sido, en términos netos, bastante positivo, aunque haya habido errores.
¿Cuáles son las reformas más urgentes en América Latina?
Hay mucho margen para hacer reformas, pero le mencionaré una: el escándalo que supone que los estudiantes universitarios, en general, provengan de ese 10% o 15% de la población con más poder adquisitivo y además paguen matrículas muy bajas. Es un subsidio de pobres a ricos, cuando la universidad debería ser al revés: un subsidio de ricos a pobres. Ésta es una reforma que suavizaría el descontento social y ayudaría a reducir la brecha social.
¿Sigue siendo válido el modelo chileno?
Mi pregunta sería: ¿Qué elementos de la política económica chilena cambiaría uno para hacerla mejor? Hasta ahora no tenemos respuesta. Estuve en Colombia el verano pasado participando en una conferencia, y quien habló inmediatamente antes de mí fue el ex presidente Ricardo Lagos. Su discurso podría haber sido presentado por un profesor de economía del gran periodo de la Universidad de Chicago. Él es economista y explicó las cosas con nuestras mismas palabras. El hecho de que partidos políticos de izquierda finalmente hayan abrazado las lecciones de la buena ciencia económica es una bendición para el mundo.

¿Somos cultos los chilenos?

La censura que ejerció semanas atrás el gobierno “democrático” sobre TVN ha motivado a Chile Liberal a profundizar sobre las causas del desencanto de la sociedad frente al escuálido panorama cultural de hoy. Nuestro país ha vivido momentos de esplendor cultural como en la época en que la bohemia era significativa, con un Neruda o un Huidobro (y sus locuras en las lejanías desatadas), por nombrar sólo a los íconos, pero hubo alguna vez un ambiente cultural vibrante. Todo acabó de golpe (literalmente) en 1973.

Hoy disfrutamos de un mayor poder adquisitivo pero la cultura permanece rezagada. No es deber de los políticos el revivirla, pero sí pueden ayudar a no asfixiarla. El telefonazo del ministro Foxley a TVN es uno de los hechos que coharta la libertad de expresión, que es la tierra fértil donde florece y da frutos la cultura.

La televisión es un medio poderosísimo, omnipresente, y mal utilizado. Creemos que es fundamental que la programación cultural atienda las necesidades del país lo que seguro abrirá nuevos horizontes laborales para libretistas, historiadores, productores, técnicos, y muchos otros, aparte de complementar a la renaciente industria cinematográfica. Actualmente, los chilenos deben conformarse los domingos con “la cultura entretenida de TVN” que, seamos francos, es bastante soporífera, no tiene nada de entretenida.

La audiencia quiere ver programas reales, ojalá polémicos, que desaten discusiones y muchas columnas en los periodícos. Menos farándula y más argumento sobre temas interesantes como indagar sobre las motivaciones reales de la Guerra del Pacífico, nos gustaría conocer la vida real de Arturo Prat (¿héroe o chiflado?), queremos enterarnos porqué O’Higgins ordenó a asesinar a Carrera, ¿no nos gustaría ver un documental al respecto? Así como Subterra motivó al autor de este artículo a viajar a Lota y vivir en carne propia, aunque sea por unos minutos, la sórdida realidad de los mineros del carbón, creemos que mucho material audiovisual se puede mostrar al país que sirva para estimular la sinapsis, para hacer trabajar la materia gris de la sociedad chilena, deseamos reflexionar y cuestionar nuestra identidad nacional. Decíamos anteriormente que muchas fuentes laborales se pueden abrir para libretistas, que pueden ser historiadores o investigadores de distintas áreas, que podrían haber asesorado mejor a los creadores de Héroes, por ejemplo. Digamos que estos programas, a pesar de las falencias, deben continuar, y perfeccionarse, y multiplicarse.

Cómo no va a ser interesante, por ejemplo, conocer los altercados entre los liberales románticos chilenos del siglo XIX contra la Revista Católica, mostrarle al país quienes fueron José Victorino Lastarria, Guillermo Blest Gana, Diego Barros Arana, Benjamín Vicuña Mackenna, Domingo Santa María, y muchos otros, indagar sobre el ex presidente Balmaceda y la grave inestabilidad que aquejó al país después de la guerra (mientras que Perú vivió una época de esplendor), agradeceríamos que se mostrase televisión sobre los personajes que existen en el inconsciente colectivo pero que hoy no son más que nombres de calles por las que transitamos, pero tenemos una historia nacional que redescubrir, que nos fascinará cuando nos adentremos en ella, pero es imposible si tenemos a las excelentísimas autoridades de gobierno metiendo sus narices. Hablábamos antes en Chile Liberal de la esclavitud, y ya hay polémicas en Inglaterra por la nueva película Amazing Grace que narra la historia de William Willberforce. ¿Cuándo tendremos una película sobre nuestro Manuel Rodríguez? ¿O sobre la Guerra de Arauco? Se dice que viene una producción sobre el Adiós al Séptimo de Línea, esperemos que sea de la calidad y seriedad que se mere, sólo esperamos que ninguna autoridad de gobierno se entrometa.

La televisión, y la culturización de las masas
La masa televidente parece bastante embobada, pero insistimos que debemos mejorar la parrilla programática. Cuando Cristián Warnken fue despojado de La Belleza de Pensar, una alarma se encendió en el país que nos sirivió para darnos cuenta que estamos tocando fondo, y que había sólo un programa de calidad. Pero la TV también puede emplearse para reforzar la educación escolar especialmente en las zonas rurales y lugares más alejados, donde quizás no podemos construir salones de clases de calidad óptima, ¿por qué no aprovechar al máximo la televisión? Incluso en estos lugares remotos existe un aparato de televisión en cada hogar. ¿No podemos sacarle provecho? Ha habido iniciativas al respecto pero han sido tímidas o insuficientes. En las Falklands, los ingleses han inteligentemente usado la BBC y la radio para transmitir "clases" a los colonos. Sí, a miles de kilómetros de distancia, la educación llega a un par de islas al fin del mundo. ¿Por qué no imitamos este ejemplo?

Invitamos a repensar la televisión que necesitamos hoy, donde las economías se basan en la capacidad de cada país de investigar y producir conocimiento, la knowledge economy necesita personas educadas. Con los bodrios que transmiten las televisoras chilenas, no tenemos posibilidad alguna de insertarnos en la nueva realidad mundial.

El cine y el teatro, una llamita de esperanza
Las salas de cine se han llenado y la calidad ha mejorado considerablemente aunque aún el cine chileno no ha logrado premios internacionales ni aún hemos industrializado esta actividad, pero nuestros legisladores aún pueden hacer más para eliminar trabas (impuestos) a los trabajadores de la industria cinematográfica. Iniciativas como la creación de ministerios de cultura y demases son de dudosa eficacia, creemos que lo mejor es un marco legal que garantice la libertad plena, con mímimas cargas tributarias, y donde los privados sean incentivados para invertir en producciones locales. (Ver artículo de The Economist)

Francia tiene una notable industria cinematográfica, España ha logrado realzar su imagen país gracias a Almodóvar y sus musas (Penélope Cruz, una de ellas), para qué hablar de EEUU, cuya industria genera más ingresos que Codelco. La Concertación insiste en crear instancias burocráticas. Creemos que el impulso actual que vive el cine puede verse cohartado con la acción del gobierno, no es disparatado pensar en un ministro censurando películas, ya lo vimos con Foxley.

La imagen país es esencial en la economía internacional, que permite posicionar mejor a los productos de cada país. Tal como lo insinúa The Economist (ver aquí), nuestro país carece de una imagen poderosa, lo que a la larga puede afectar nuestra vocación exportadora.

El teatro por su parte ha logrado relevancia notable. Desde el desaparecido Andrés Pérez hasta el Teatro a Mil, vemos que cada vez más la gente reclama más y más cultura. La Pequeña Gigante fue la prueba más palpable, los chilenos nos agolpamos a verla y vitorearla. Queremos más cultura.

Los libros y la gran decepción de Chile Liberal
Los colaboradores de este sitio sienten profunda frustración al ver que nadie se ha propuesto ni eliminar el IVA a los libros ni las tasas aplicadas a la importación de material bibliográfico (inlcuimos también el software, al cual se le aplica un 15% de impuesto). La Concertación, que se llena la boca hablando de ayudar a los pobres, no ha movido un dedo (ciertamente, no el de Lagos) para desgravar los libros. La Alianza, que normalmente incita a bajar impuestos, tampoco se ha pronunciado sobre el tema. Es decir, ambos valen callampa (excuse my French).

Ambos bloques deberían avergonzarse de seguir cobrando impuestos a todo aquel que se compre un libro. Pedimos a nuestros lectores que no cesen de reclamar su derecho a comprar libros sin que interfieran las sucias garras del estado. Los libros más baratos desincentivarían a los piratas e ilegales y, seguramente, más publicaciones verían la luz del día. Quizás valga la pena aplicar impuestos a la comida chatarra y usar estos recursos para mejorar el equipamiento de las bibliotecas del país. Pero la cultura no debe sufrir las consecuencias del estatismo imperante.

El café y la vida social
No nos extrañemos que Ibrahin Ahmadinejad, mandamás de Irán, haya aplicado restricciones severas a los cafés de Teherán. La peor pesadilla para un dictador (o aprendiz de dictador, como es éste amigo iraní de Chávez) es que haya individuos libres sentados alrededor de una mesa saboreando un buen café, leyendo la prensa del país. Este tipo de acto subversivo es condenado en muchos lugares. En Chile, por ejemplo, se aplicaron toques de queda.

Este tipo de actividades que aparentemente parecen de ocio son las que llevan a las gentes a informarse, y la consecuencia de informarse es tener opinión. Cuando la opinión pública comienza a fraguar una "real opinión” es cuando los dirigentes de cada país se preocupan. Hoy no hay restricciones tan descaradas como en otros lugares (Cuba, China, Irán), pero la prensa auténticamente libre, que actúe como contrapeso a la autoridad oficial, escasea. Pero creemos que los cafés y salones de té también escasean. Amigo lector, no se le ocurra leer el diario en un lugar decente, porque sólo se le ofrecen esos mugrosos cafés con piernas, y peor aún, la Corte Suprema intenta amordazar a la prensa.

Una vez más, Cristián Warnken nos lanza un salvavidas. Su excelente Café Mosqueto (Metro Bellas Artes) es un excelente lugar, que ha florecido y se llena cada vez más de gente e incluso de turistas extranjeros. Todo el casco antiguo de Santiago Centro parece lentamente comenzar a despertar. Se destaca en especial el Barrio Mulato Gil, el Parque Forestal, Bellavista, Plaza Ñuñoa, y desde luego el sector oriente, aunque carece de la atmosfera céntrica. El café y almacén la Rosa, en el Parque Forestal, es probablemente uno de los favoritos de Chile Liberal. Pero desgraciadamente, hay otros que se cierran. Nuevamente, Cristián Warken nos abre los ojos y nos recuerda que el tradicional Café Riquet de Valparaíso está a punto de demolerse. Inaceptable. ¿Por qué no mejor demoler los inútiles Ministerio de Educación, Trabajo, Secretaría General de la Presidencia, entre otros? ¿Por qué demoler los espacios de la gente? Proponemos cobrar cero impuesto a los cafés y salones de té, así incentivamos la sociabilidad y crearemos más puestos de trabajo. Se puede compensar con aumentos en los impuestos a esas mierdas de McDonalds o Burger King, que son repugnantes
Todo lo anterior converge para generar las condiciones que resuciten la escena cultural y social de Chile, pero sólo es posible cuando proviene directamente desde los individuos. Esperamos que este blog algo ayude en cuanto a sacar la voz, ya que somos uno más de los miles que exigen nuestra libertad de expresión. Hacer un Chile mejor debe surgir de la inciativa individual de cada uno de nosotros porque, no andemos con cosas, no somos un país muy culto (pero hacia allá vamos).

martes, 27 de marzo de 2007

Una mirada rápida a Chile y al mundo

MUCHAS COSAS HAN ACONTECIDO EN MUY POCO TIEMPO, Y TAL COMO UN NEWTON DESCOMPONIENDO LA LUZ CON SU PRISMA, NOSOTROS ANALIZAMOS LA REALIDAD CON NUESTRO PRISMA LIBERAL
Terrorismo, incompetencia, reacciones tardías, y periodistas amordazados

Condolezza Rice parece gesticular algún agrado por un estado palestino, lo que aplaudimos ya que EEUU necesita ejercitar más la musculatura diplomática y dejar en reposo la fuerza militar. Con los terroristas y vándalos de Hamas en el poder hay my pocas posibilidades de que reine la democracia, pero tal como en Irlanda del Norte, los terroristas (Gerry Adams e Ian Paisley) después de una vida de estupidez, inoperancia y sangre inocente derramada, pueden adoptar el camino constitucional y democrático.

Y qué nos han dicho a los chilenos, si la ex simpatizante del terrorismo Michelle Bachelet Jeria por fin parece reaccionar y está comenzando a tomar el toro por las astas. Nosotros, los miembros de Chile Liberal, en ningún momento apoyamos a Bachelet ni jamás creímos en sus desvaríos tales como gobierno ciudadano o paridad. Dudamos desde siempre de su capacidad para formar equipos de trabajo y el tiempo nos da la razón.
Comparen por ejemplo que nos dice aquí un blog amigo (Blog de la República): el intangible, el que da credibilidad, la valoración que le tiene la gente, lo auténtico de Michelle, de Lagos jr, de Paulina Veloso, de Velasco & Velasco no se compra en la botica ni menos en las juventudes de partido. Pues bien, Bachelet ha por fin pedido disculpas a la ciudadanía por el TransFiasco, con lo que sólo un grupúsculo de recalcitrantes seguirá defendiendo el turbio legado de Lagos y su infame "proyecto estrella" que ha desencadenado la peor crisis de lo que va de apenas UN AÑO de gobierno. Más aún, la presidenta le ha dado un puntapié en las nalgas (por decirlo elegantemente) a varios de los nombrados por los amigos republicanos, y las falencias si bien permanecen, al menos se han detectado.

Desde luego, siempre dijimos que la paridad era una burla. Nuevamente el tiempo nos da la razón y esperamos que esta vez el equipo de La Moneda ande algo mejor. Lagos Weber también parece tener sus días contados pero se le buscará una salida discreta, en caso que la presidenta sí se decida a contar con un equipo capaz, donde impere la organización por sobre las tinieblas de la improvisación.

Como ha dicho Pato Navia ayer, el gobierno sigue en la UTI, y como nos reitera en su blog (ver aquí) si estos ajustes no corrigen el rumbo, este gobierno será un fracaso.

Lo único rescatable ha sido mantener a Andrés Velasco y su equipo económico, y esperamos que el timonel de hacienda actúe como caudillo en esta nueva etapa, ya que está más que claro lo que dijimos durante la elección presidencial, que sobre materias económicas, Michelle Bachelet deja bastante que desear.

Finalmente, amigos lectores, se intenta amordazar a los periodistas de Chile con este ridículo auto de la Corte Suprema que es una mordaza a la libertad de prensa. Esperamos que los periodistas de tribunales se decidan a presentar un recurso que permita revocar esta medida abusiva e incompatible con el Chile democrático al que aspiramos.
Más información:

lunes, 26 de marzo de 2007

Continuación: Esclavitud, doscientos años después

Continuamos con la segunda entrega...

Adam Smith: los trabajadores libres producen más que los esclavos
El padre del liberalismo clásico, Adam Smith, nos explicaba en su obra Wealth of Nations (La riqueza de las naciones) que un hombre sin propiedad busca “engordar lo más posible, trabajando lo menos posible”, palabras duras para referirise a los esclavos. Pero era en realidad un ataque a los esclavistas y un mensaje a la sociedad inglesa. Un esclavo, al no tener propiedad, vale decir, al no ser libre, tiende a trabajar de mala gana y lo menos que pueda ya que se ve imposibilitado de mejorar su condición. Su amo debe proveerle de todo y, sin duda, la única forma de sacarle rendimiento es mediante la violencia y la agresión física, lo que degrada tanto al amo como al esclavo.
El resultado es elocuente, Adam Smith nos dice que un campo labrado por hombres libres será siempre más productivo que el trabajado por esclavos. Como el mismo Smith nos enseñaba que “la avaricia es buena”, un hombre avaro debe emplear sólo hombres libres, tratarlos con la dignidad que el trabajador se merece, y de esa forma se aseguraría ganancias y rendimiento mayor que un esclavista.

Sin duda que por este camino Adam Smith logró remecer la conciencia de muchos y, junto con los boicots de Clarkson (que apelaban a disminuir la demanda por productos producidos por esclavos) buscaba desterrar la esclavitud. Comprobamos nuevamente que el altruismo tiene menos que ver en la abolición de la esclavitud que el individualismo. La mano invisible y la avaricia fueron determinantes.

Ingleses y norteamericanos: ¿Deben pedir perdón por la esclavitud?
El 40% de la producción de azúcar en las colonias inglesas del Caribe eran impuestos que iban directamente al erario nacional británico. Pero como hemos visto, es tan degradante la práctica del trabajo con esclavos que inevitablemente se producirían revueltas y guerras, que efectivamente estallaron (la emancipación de las colonias inglesas y la guerra civil americana, por ejemplo) y mermaron el desarrollo económico de estas naciones. Por otro lado, los países más prósperos del mundo son las escandinavos, que basaron su economía en el trabajo libre. La riqueza de EEUU e Inglaterra se debe más al espíritu emprendedor y la creatividad que al abuso de esclavos, que como mano de obra resultó a largo plazo ineficiente y cara.

Sin embargo, sí tuvo un impacto inicial, y muchas de las casas señoriales que existen hoy en Jamaica, entre otros, se construyeron con la sangre de la esclavitud. Hasta hoy no ha habido un gesto formal de perdón por parte de las autoridades nacionales de las otrora naciones esclavistas, pero es un gesto necesario y pendiente. Algo insinuó Tony Blair hace algún tiempo y ha habido iniciativas en algunos estados norteamericanos, pero el gesto no ha sido contundente.

Creemos que es imperativo que el Primer Ministro Británico y el Presidente de Estados Unidos pidan en conjunto perdón por el comercio de esclavos, en el caso inglés, y por emplear mano de obra esclava, en EEUU. Pero los gestos deben ir acompañados de acciones concretas.

Una de ellas es eliminar de una vez la mala costumbre de las naciones occidentales de enviar ayudas inútiles a África, que a esta altura equivalen a seis veces el plan Marshall, porque éstas no son más que asistencialismo llevado a escala global. Lo que África necesita es que Europa y EEUU liberen sus barreras comerciales y permitan el ingreso de productos africanos, y que los nativos del continente negro puedan posicionar sus productos en los mercados del primer mundo y unirse a una economía libremercadista, que es el único mecanismo capaz de sacarlos de la pobreza. No al envío de dinero a África, sí al libre comercio.

Es abominable que hace algunos meses los principales mandamases de África hayan sido invitados a China a estrechar lazos. Este es exactamente el camino que no asegura el progreso. China no es una nación de libre comercio y sólo quiere obtener recursos naturales baratos, aparte de extender su neo-comunismo. Vale decir, sólo buscan prolongar la miseria. Es hora de que el mundo ayude a África a salir de la pobreza por sus propios medios. El asistencialismo y el proteccionismo sólo perpetuará la miseria. Exigimos más liberalismo y más capitalismo (¡y menos proteccionismo!) para aumentar la prosperidad en el mundo.

Esclavitud en el mundo, los boicots que necesitamos hoy
Si bien en 1833 se abolió la esclavitud por completo en Inglaterra, el proceso fue lento y tortuoso. Como ya hemos dicho, sectores conservadores y eclesiásticos llamaban a mantener la esclavitud (basados en enseñanzas bíblicas o criterios economicistas miopes), aunque procuraban "humanizar" el trato. Absurdo. Finalmente se impuso la razón y el humanismo, siendo Dinamarca y Francia los primeros países que dieron el gran paso, en 1792 y 1794 respectivamente. Estados Unidos cayó en una guerra civil y muchas otras naciones comenzaron a adoptar el pensamiento de la iluminado de la Ilustración.

Desgraciadamente, aún hay 12 millones de esclavos en el mundo, y muchos de ellos son niños. Aunque el trabajo infantil pueda ser necesario en países pobres, sólo es admisible cuando no interfiere con el derecho de cada niño a disfrutar su infancia y siempre que no sea un impedimento para su formación escolar. En el mundo desarrollado, el trabajo infantil existe bajo la forma de los “Saturday jobs” de Inglaterra, donde los niños trabajan unas pocas horas en locales comerciales, lo que ayuda a formar el espíritu industrioso que necesita la fuerza laboral del mañana.

No así en India o en China, Vietnam o incluso en Brasil, entre otros países latinoamericanos, donde niños y familias completas deben trabajar en condiciones de esclavitud. Pero la “mano invisible” ya se comienza a ver en muchas campañas que han iniciado activistas del mundo entero. Las empresas que usan mano de obra esclava (o semi esclava) han sido identificadas y nombradas ante la opinión pública, de modo que todos podamos preferir los productos elaborados bajo condiciones humanas. Debemos seguir el ejemplo de Clarkson.

Nike y Adidas hoy se apresuran a exhibir sus credenciales de trabajo justo, y más allá de criticarlos por buscar mano de obra barata, debemos alegrarnos que ellos ofrezcan empleos en lugares que hasta hace poco no tenían opción alguna de recibir inversiones extranjeras. Una vez más vemos cómo el capitalismo principalmente contribuye para mejorar la condición de los pobres. Es esencial que los consumidores de occidente exijan a cada empresa que demuestre cómo contribuye al desarrollo económico de las naciones donde invierten, y que la misma masa de consumidores prefiera estos productos.

La esclavitud, sin embargo, se encuentra bajo formas mucho más sutiles pero igualmente dañinas. Los impuestos aplicados sobre el salario de cada trabajador constituye, como postula Robert Nozick, filósofo de Harvard, una forma de trabajo forzado. Y tiene razón. Por ejemplo en Francia (segundo país en abolir la esclavitud), cada trabajador destina aproximadamente dos semanas del mes en trabajar para financiar el estado. ¿No es esto una forma de esclavitud? ¿Tiene opción el trabajador de decidir si contribuye al estado o no, o al menos de elegir cómo contribuye? Estudiemos el caso nuestro, por ejemplo nosotros pagamos impuestos para mantener a Carabineros de Chile, pero cuando necesitamos protección policial y ésta no llega, ¿no fueron nuestros impuestos obtenidos mediante el trabajo forzado? ¿Qué ocurre con el dinero que nosotros entregamos al estado? O dicho de otro modo, ¿que ocurre con el dinero que a nosotros nos arrebata el estado?

Una delgada línea separa la carga tributaria de la esclavitud, lo que nos lleva a considerar cada vez más la urgente necesidad de reducir el tamaño del estado y de entregar más espacio de libertad individual a cada persona, para que el dinero, es decir, el fruto del trabajo, se destine a los fines que cada cual estime conveniente y no quedar a merced de unas autoridades gubernamentales que normalmente se enriquecen a costa del trabajo del resto, tal como los amos esclavistas de las colonias inglesas de antaño.

Esclavos en Chile, ayer y hoy
En Chile vivimos en carne propia este flagelo mediante la figura de la “encomienda”, en la cual con la bendición de la Santa Iglesia Católica, se le entregaba a los inquilinos una partida de indios que trabajaban para su amo a cambio de la “evangelización”, vale decir, una serie de golpizas a cambio de repetir un Padrenuestro y un Avemaría. Los abusos y aberraciones eran evidentes pero no nos extrañemos que la Iglesia Católica no haya hecho mucho por terminar con esta barbarie. En 1789, por orden de Ambrosio O’Higgins, se puso punto final a esta práctica. En términos reales, la economía colonial no se vio mermada ya que las encomiendas eran cada vez más escasas producto de la extinción de la población indígena y de la abundancia de mano de obra barata de los mestizos.

Pocos esclavos negros hubo en Chile, y por varias razones. Una, era muy caro traerlos, normalmente morían en las tierras frías del sur o no sobrevivían el cruce de la cordillera. Dos, en Chile nunca hubo grandes plantaciones de algodón, café, tabaco o caña de azúcar, por tanto las autoridades y la Iglesia se las arreglaron con los nativos. Y cuando estos escasearon, hubo mucho mestizo que trabajaba a cambio de honorarios miserables.

Uno de los momentos más dichosos de nuestra historia patria, que llena de orgullo a todos los chilenos, es saber que a pesar de ser un país modesto, nuestro Primer Congreso Nacional dio un gigantesco paso (fiel reflejo del espíritu progresista de los fundadores de nuestra nación) hacia la abolición de la esclavitud, declarando el 15 de octubre de 1811 la prohibición de que se introdujesen esclavos a nuestro país, y los hijos de los esclavos nacerían libres. Esta medida, conocida como la "libertad de vientre", acción de Manuel de Salas (liberal, como podrán imaginarse), es extraordinariamente progresista y revolucionaria para su época. Finalmente, en 1823, se declaró la esclavitud completamente abolida. Como vemos, Chile eliminó este episodio oscuro de la humanidad 10 años antes que Inglaterra.

Conclusiones de Chile Liberal
Como hemos visto, el acto inhumano de esclavizar al prójimo fue practicado durante siglos pero no fue sino por acción del pensamiento ilustrado, en particular gracias a la Revolución Francesa y la Declaración universal de los derechos del hombre y el ciudadano, que junto al pensamiento liberal de Adam Smith y muchos otros activistas, incluidos los propios esclavos africanos, se pudo poner fin a esta práctica.

La lucha contra los Conservadores fue feroz ya que este sector normalmente apela a criterios dogmático-religiosos para mantener el status quo, y hasta hoy continúan su animadversión contra cualquier declaración de derechos (las diatribas de los conservadores hoy se evidencia en la ira contra la actual Declaración de Derechos Humanos).

El supuesto altruismo que pretenden los ingleses no es tal, ya que fueron ellos mismos quienes iniciaron el comercio de personas, y curiosamente celebran como gran logro el haberle puesto fin. Es hora, además, que se le pida perdón a los descendientes de los esclavos y que las palabras vayan acompañadas de acciones concretas en pro de la liberalización de los mercados del primer mundo para abrir el comercio con los países de África y América Latina y acabar con la pobreza endémica que los aflige.

Rescatamos, finalmente, el notable anhelo libertario de los próceres de nuestra emancipación. No podemos sino aspirar hoy a continuar con su ejemplo y hacer de Chile y el mundo un lugar más libre, donde se respete la libertad individual.

sábado, 24 de marzo de 2007

Esclavitud, doscientos años después


EL 24 DE MARZO DE 1807 EL PARLAMENTO BRITÁNICO VOTÓ POR ABOLIR EL COMERCIO DE ESCLAVOS, PONIENDO PUNTO FINAL A UNA INDUSTRIA QUE TRANSPORTÓ MÁS DE 10 MILLONES DE AFRICANOS A AMÉRICA. EN CHILE LIBERAL CONTAMOS LA HISTORIA QUE LOS INGLESES SE NIEGAN A RECONOCER Y COMO SIEMPRE OFRECEMOS NUESTRA NARRATIVA Y NUESTRA OPINIÓN.

COMENZAMOS UN NUEVO MINI CICLO EN DOS ENTREGAS.


Los nombres de Thomas Clarkson y William Willberforce no significan nada para los chilenos, sin embargo, para nuestros amigos ingleses son sinónimo del espíritu progresista del siglo XIX, y para la historia, son los dos máximos líderes abolicionistas de la historia del Imperio Británico. Ambos fueron cristianos devotos y activistas comprometidos por poner fin a la aberración más bestial de la historia de nuestra especie, de hecho la ONU la describe como “el sistema de violencia institucionalizada de mayor magnitud en la historia de la humanidad”.

Pero la verdad sea dicha, todo lo anterior uds lo pueden leer por sí mismos en los excelentes artículos de la BBC
Clarkson, padre del boicot moderno, y toda la serie El comienzo del fin. Hay mucho más que decir al respecto, y hay un ángulo que los propios británicos ignoran, quizás inconscientemente. Tal como los chilenos insistimos en creer que el Combate Naval de Iquique fue una proeza, o que Bernardo O’Higgins fue un personaje mítico e intachable, también hay que profundizar sobre la figura de los abolicionistas, la importancia negada a los propios africanos, la complicidad de los cristianos y del Partido Conservador, y la importancia de la libertad.

Thomas Clarkson, el activista, el parlamentario, el Whig
Ya hemos dicho que los precursores del liberalismo fueron los whigs ingleses, quienes siempre lucharon por darle mayor poder al parlamento y quienes siempre se involucraron en la defensa de las libertades civiles y sociales. El abolicionista Thomas Clarkson, si bien fue tory (Conservador), trabajó arduamente con los whigs para debatir en el parlamento las leyes que terminarían con el comercio de esclavos, que como pueden imaginarse, no fue visto con buenos ojos por los conservadores.

Clarkson viajó incansablemente recopilando testimonios de esclavos y trabajó en la difusión de estos actos barbáricos en su propio país. Logró apelar a la conciencia de los individuos añadiendo la leyenda “no hecho por esclavos” a productos como el azúcar, cacao, etc., de modo que se lograse disminuir la demanda por los productos obtenidos bajo trabajo forzado, y así facilitar el camino para lograr la abolición total de la esclavitud (que llegó finalmente en 1833). Clarkson es recordado como el padre del boicot moderno, y sin duda que hoy empresas como Nike, Adidas y muchas otras sufren en carne propia la aplicación de estas medidas por parte de las sociedades libres del mundo. (En la segunda entrega, volveremos sobre este tema).

Una vez más comprobamos la diferencia que puede hacer en el devenir de la historia el accionar de un sólo hombre, un individuo decidido a poner fin a la mayor injusticia de la historia universal, y fue mediante su trabajo parlamentario que lo logró. Hermoso ejemplo para todos nosotros, especialmente hoy, cuando vemos como la política se ha divorciado de la realida dejándonos a todos totalmente decepcionados. Hoy en día necesitamos más Thomas Clarksons en nuestros parlamentos.

William Willberforce, la voluntad (will) sin la fuerza (force)
Éste fue el hombre que logró más renombre que Clarkson gracias a los innumerables libros escritos sobre él por parte de su propia familia, pero su trabajo dependió del éxito de Clarkson en el parlamento.

Miembro de la alta sociedad y cristiano devoto (cuáquer, “quaker”), fue miembro de los tories y también se decidió a trabajar para eliminar el comercio de esclavos, si bien murió antes de ver la esclavitud finalmente abolida. Aún se le celebra con entusiasmo en su país natal por ser el hombre que introdujo una mejora en la moral y las costumbres.

Lo curioso es que él trabajó principalmente a partir de su convicción cristiana, pero Chile Liberal cuestiona su sentido religioso en medio de su campaña, ya que no sólo se presta para promulgar un asunto priviado como la fe a la sociedad pública, sino que en esta lucha entra en una paradoja que ningún creyente logra explicar satisfactoriamente.

La biblia celebra la esclavitud
Como hemos dicho antes en este sitio, la moral evoluciona tal como el homo sapiens evoluciona. Cada época histórica tiene su propia moral demostrando de esta manera que la moral no es única ni eterna, sino que avanza con el correr de las generaciones. En este contexto, en los tiempos de los primeros cristianos se consideraba la esclavitud como algo normal, y ese libro llamado “biblia” fue un reflejo de su época. Veamos el siguiente pasaje en
Efesios 6:5
5Esclavos, obedezcan a sus amos terrenales con respeto y temor, y con integridad de corazón, como a Cristo.
6No lo hagan sólo cuando los estén mirando, como los que quieren ganarse el favor humano, sino como esclavos de Cristo, haciendo de todo corazón la voluntad de Dios.
7Sirvan de buena gana, como quien sirve al Señor y no a los hombres,
8sabiendo que el Señor recompensará a cada uno por el bien que haya hecho, sea esclavo o sea libre.
9Y ustedes, amos, correspondan a esta actitud de sus esclavos, dejando de amenazarlos. Recuerden que tanto ellos como ustedes tienen un mismo Amo* en el cielo, y que con él no hay favoritismos.


¿Llamó Pablo en algún momento a abolir la esclavitud? No.

A lo mucho, se le pide sumisión a la víctima y se apela tímidamente al buen corazón del esclavista, haciéndole temer quizás algún castigo metafísico “en la otra vida”. Por mientras, hay que mantener la cabeza gacha. Con razón existe el cliché “la religión es el opio del pueblo”.

Por este motivo es que debemos desconfiar de quienes acusan a los liberales de “relativismo moral”, ya que ha sido gracias al impulso y al progrsismo intrínsecamente liberal que la humanidad ha perfeccionado su moral y costumbres. Si siguiésemos al pie de la letra ese libro, aún creeríamos en Adán y Eva y Darwin no se habría decidido a explorar el mundo (Chile incluido) en el Beagle, y el esclavismo aún seguiría siendo la práctica en todo el planeta.

La lucha de los propios esclavos, lo que los ingleses ignoran
Pero tanto celebrar a Clarkson y Willberforce, tanto exaltar al hombre blanco que llega a liberar ante el mal de este mundo, los ingleses han históricamente negado la importancia de la lucha y la resistencia de los mismos negros. Por ejemplo, poco celebran a Toussaint L'Ouverture. Pero fueron ellos quienes se forjaron su propia libertad. Aún persisten en Inglaterra los cuadros conmemorativos en iglesias y otros recintos la mitificación de los abolicionistas blancos, lo que no hace sino perpetuar el concepto de que los negros son incapaces de valerse por sí mismos, o como si ellos hubiesen sufrido en silencio hasta que los iluminados llegaron a salvarlos.

Muchos otros factores influyeron en la eliminación del comercio de esclavos, siendo los propios intereses de los ingleses uno de ellos. En las condiciones paupérrimas en que los negros eran transportados desde África, muchos morían de inanición o debilitados por la malaria, o deshidratados por la diarrea que desencadenaba el cólera. Hacinados en los barcos, donde se buscaba maximizar el transporte de individuos (vean el
mapa que mostró Clarkson en Inglaterra), lo que llenaba de excrementos a los esclavos mismos causando una altísima mortalidad y, por tanto, una baja en la productividad de la industria esclavista.

Pero estas condicones inhumanas afectaban también a la tripulación de los barcos, todos ingleses. Muchos morían junto con los negros, producto de lo insolubre de las embarcaciones, situación que los mismos mercaderes alentaban, ya que después de transportar una partida de esclavos, si la tripulación moría, entonces las ganancias eran mayores: se ahorraban pagarle los honorarios a los capataces de la esclavitud.

En Inglaterra no tardaron en percatarse de este detalle y se asumió que quienes trabajaban en los barcos morirían tarde o temprano. Los ingleses sólo últimamente han despertado ante esta realidad y han notado que fue su propio individualismo lo que movilizó a muchos para terminar con el comercio de esclavos. Comprobamos, una vez más, el valor del individualismo como fuerza en pos del bien común, tal como lo había enseñado Adam Smith algunas décadas antes (en 1776). Es a partir del bienestar de cada individuo que logramos el bien de todos.

El hombre blanco comenzaba a darse cuenta de lo nefasto del trabajo forzado, pero principalmente porque afectaba sus propios intereses. El altruismo fue secundario. El mito de los abolicionistas es, como todo mito, es un hecho cierto pero realzado en el imaginario de las masas.


Continuaremos el lunes la segunda entrega de este ciclo, con los siguientes temas:
  • Adam Smith: los trabajadores libres producen más que los esclavos
  • Ingleses y norteamericanos: ¿Deben pedir perdón por la esclavitud?
  • Esclavitud en el mundo, los bicots que necesitamos
  • Esclavos en Chile, ayer y hoy
  • Conclusiones de Chile Liberal

Cambios editoriales en Chile Liberal... y saludos

Estimados lectores,

Hemos dicho que no sólo el homo sapiens evoluciona, sino que la sociedad evoluciona, la moral evoluciona, y Chile Liberal no es ajeno a la evolución. Comenzamos en septiembre del año pasado y varios ajustes se han implantado, y seguimos mejorando para hacer de este un espacio digno de visitarse en la blogósfera.

Nuestro sitio ahora se define como Reflexiones sobre la LIBERTAD INDIVIDUAL, que consideramos más breve, vívido, y más específico que el antiguo "Un espacio de reflexión en torno a la libertad". Las controversias inacabables sobre qué es la libertad las abandonamos, y sin duda que es demasiado complejo de abordar. Podemos decir que la vida entera es una reflexión sobre la libertad. Seguiremos los pasos del valor quintaesencial del hombre, la libertad, pero esta vez desde el sendero de la libertad individual, transportándonos hasta los orígenes mismos del liberalismo, con la ilustración europea y el nacimiento del humanismo laico.

En cuanto a nuestro perfil, hemos dejado de llamarnos Movimiento Liberal Progresista, lo que no nos deja de apenar. El concepto de progresismo, surgido en el siglo XVIII, ha sido tergiversado al punto que las corrientes de centro-izquierda que abogaban por cambios y progreso social han acabado por fundirse con socialismo puro y rancio, y de ahí las complicaciones han sido demasiadas. Elaboraremos y publicaremos pronto un artículo sobre el progresismo, y seguiremos considerándonos esencialmente progresistas, pero por claridad y coherencia preferiremos denominarnos simplemente Chile Liberal. Nuestro objetivo sigue siendo luchar por la libertad del ser humano para emprender, para pensar por sí mismo, y para ponerse sus propios límites, sin depender de entes externos. Esperamos seguir congregando a todos quienes deseen compartir o criticar nuestros planteamientos, que son sólo ideas, postulados, y no verdades reveladas ni eternas.

Hemos añadido tres libros entre nuestras obras favoritas, que constituyen el núcleo irreductible de nuestro marco teórico. Desde luego hay muchas obras, pero hemos seleccionado las más relevantes:

Consideraciones sobre la naturaleza y las causas de la riqueza de las naciones, de Adam Smith, obra magistral que resume nuestra visión del capitalismo como fuerza del bien y en línea con la libertad para emprender y para superar la pobreza

Teoría de los sentimientos morales, Adam Smith nuevamente, donde se aborda la libertad desde un plano social y que refleja el espíritu benevolente del economista y filósofo británico

Crítica de la razón pura, de Immanuel Kant, quien fue el filósofo más trascendente de la Ilustración, quien buscó aunar racionalismo y empirismo, y que contituye una de las obras más influyentes de la historia

En nuestro perfil también hemos añadido La Liberté guidant le peuple, del pintor romántico francés Eugène Delacroix. Rescatamos su sentido apasionado de lucha y del gran cambio que significó la Revolución Francesa, que ha influenciado notablemente a todo el mundo occidental, y Chile Liberal no es la excepción.

Nuestros artículos
Comenzamos divulgando artículos de interés que han constituido nuestro base teórico, y a partir de esta plataforma hemos ido publicando artículos propios, combinando comentarios de actualidad, crítica social, y temas generales de reflexión, que contribuyan a fortelecer el espóritu cuestionador de quien nos lea, e ir desde las bases mismas, aprovechando las ventajas de la Web, creando espacios ciudadanos que reflejen los intereses e inquietudes de todos nosotros.

Como dato estadístico (y curioso), les contamos que el artículo que registró un récord de visitas fue Las 27 medidas de “La Dama”, sobrepasando las 400 visitas en un sólo día. El más comentado fue En defensa de nuestros amigos gays y lesbianas, con 28 comentarios.

Por lo tanto, concluimos que hemos hecho muy bien en enfocarnos en la libertad económica y en la promoción de espacios de libertad social, ambas libertades constantemente amenazadas por los elementos exaltados de izquierda y derecha (socialistas y conservadores), pero es a partir de esta confrontación de ideas en la que contruimos una sociedad pluralista, tolerante y democrática.

Continuaremos con artículos de actualidad política cuando la situación lo amerite, seguiremos con nuestra mirada social, y seguiremos explorando las formas de maximizar y perfeccionar nuestra economía de mercado.

Nuestros lectores
Nos regocijamos al ver el excelente nivel de las intervenciones de cada uno, quienes nos felicitan y de quienes nos critican, de quienes comparten algunos planteamientos, y de quienes simplemente se interesan en leer algo distinto. Nuestro objetivo es poner temas en la palestra, formular una opinión, y dejar que cada uno opine. Incluso cuando el debate ha sido rudo, ha imperado la cordura y la elegancia en cada una de los comentarios. Esto nos obliga a seguir con este espacio.

Felicitamos a todos y alentamos a que publiquen aquí sus propios blogs y nos inviten a leer sus opiniones. Ante todo, nuestra postura es “viva la diferencia”.

Los correos también han llegado abundantemente a nuestra casilla, chileliberal@gmail.com. Algunos se molestaron con La partida de un tirano, y nos manifestaron su indignación. Otros consideraron inaceptable Por qué es bueno que los gays adopten hijos, y otros nos hicieron saber que en Diez preguntas a los liberales había demasiadas contradicciones. Pero en el nuevo Chile que queremos constuir, no debemos temerle a la discordia ni a la diferencia de opinión. Al contrario, es nuestro deber el tener nuestra postura inidividual, y a partir de ella, lograr los consensos que nos permitan avanzar.

Lo que viene
Como ven, hemos comenzado un ciclo sobre la abolición de la esclavitud, y pronto publicaremos artículos sobre la semana santa. Seguimos la positiva experiencia del ciclo sobre la guerra en Iraq, cuyas dos entregas fueron leidas por más de 200 personas.

Referencias
Seguiremos añadiendo vínculos a conceptos u otros artículos o blogs, para que ustedes sigan averiguando sobre cada tema que analizamos acá desde un ángulo liberal.

Proyectos
Estamos aún en planes tentativos de refundar el Partido Liberal, con los próceres del partido de antaño, y con todos quienes han compartido los ideales libertarios, hoy dispersos en varios partidos políticos, en el mundo académico o en distinos campos laborales. Esperamos participar también en otras instancias, pero la política es la más difícil.

Los actuales cófrades del sistema político están aferrados al sistema binominal actual que hace casi imposible iniciar nuevos partidos, y bloquean la entrada de quienes les puedan hacer la competencia. No deja de ser paradójico que los liberales necesitemos liberalizar el espectro político e inyectarle las hormonas necesarias que devuelvan el poder a los individuos. Algunos liberales incluso cuestionan la validez de convertir al liberalismo en partido político. No estamos de acuerdo con ellos. No podemos seguir con las nalgas cómodamente situadas sobre el sofá sin hacer nada. Hay que hacer algo.

Por el momento, tenemos que seguir la resistencia intelectual contra el las corrientes colectivistas.

El liberalismo
No somos ni los portavoces oficiales ni los dueños del liberalismo, simplemente quisimos rescatar los ideales que impulsaron en el siglo XVIII a muchos ilustrados, en el siglo XIX a los románticos liberales de la República Liberal de Chile, donde se forjó nuestra patria, a la Alianza Liberal del siglo XX que llegó a la presidencia con don Artudo Alessandri y la nueva democracia... y de ahí nos separamos en posturas extremas que hicieron desaparecer al liberalismo.

En el siglo XXI, es hora de reconstruir la democracia y de traer de vuelta los ideales libertarios que a lo largo de los siglos han contribuido al progreso de nuestro mundo.

Saludos afectuosos,
CHILE LIBERAL

viernes, 23 de marzo de 2007

Vino en Argentina y Chile: Las torres gemelas en los vinos

Las exportaciones de Argentina a EE.UU. están creciendo mucho más rápido que las chilenas. Podría ser porque sus vinos son del gusto de los norteamericanos.


Argentina está alcanzando a Chile en la producción, pero no tan rápido como podría hacerlo.


The Economist

A principios de este mes, unos 70 mil visitantes descendieron en Mendoza, la capital de los vinos de Argentina, para el festival anual que marca el comienzo de la cosecha. Los locales repletaron los cerros que rodean el anfiteatro de la ciudad, para así ver los bailes y procesiones de bellezas. Tenían mucho que celebrar: en los últimos 4 años, las exportaciones de vino de Argentina han más que duplicado su volumen y han triplicado su valor.


Hasta hace muy poco, Argentina era casi inexistente para los aficionados del vino. Eran grandes productores de vinos de mesa de baja calidad para el consumo local. Y eso está cambiando, especialmente después de la devaluación de 2002. Se ha derramado inversión extranjera, y las exportaciones se han elevado. Gracias a la llegada de productores de vino extranjeros se ha mejorado la calidad.


Con una sola mirada a través de los Andes, donde sus altas y nevadas cumbres forman una caída impactante hacia las festividades de Mendoza, se encuentra Chile. El vecino país se convirtió en un importante exportador de vinos hace una docena de años antes que Argentina. Y aún tiene ventaja.


Uno podría pensar que Argentina podría ganar esta batalla sin levantar las manos. Es el quinto productor más grande del mundo y tiene interminables tierras propicias para ello. Los productores chilenos envidian la uva Malbec de marca registrada, que produce un potente vino tinto y que se ha hecho conocida en el mundo. Frescos y perfumados blancos hechos con uvas torrontés, principalmente en los alrededores de Salta, son similarmente distintivos, aunque menos complejos. Por el contrario, Chile exporta principalmente variedades estándares, como el Cabernet Sauvignon y Chardonnay, ampliamente producidas alrededor del mundo. Su única variedad propia es el Carmenère, de la que es mucho más difícil hacer un buen vino.
Las exportaciones de Argentina a EE.UU. están creciendo mucho más rápido que las chilenas. Eso podría ser porque sus vinos robustos y frutosos son del gusto de los norteamericanos. Wine Spectator, la biblia para los aficionados norteamericanos, le da puntuaciones de 90 puntos o más (de un máximo de 100) a 172 tintos de Argentina en comparación con 138 de Chile.


Fortalezas
Pero Chile tiene poderosas fortalezas propias. Una abundancia de diferentes terruños anida entre sus numerosos valles; tiene brisas frescas del Pacífico, que permiten producir por igual, elegantes vinos blancos o tintos. Y el año pasado Wine Spectator le dió 96 puntos a Don Melchor 2003, el mejor Cabernet de Concha y Toro, la mayor empresa de vinos.
La mayor estabilidad económica de Chile también ha ayudado. "Para los vinos de calidad se necesitan unos 15 ó 20 años para que la inversión madure", dice Aníbal Ariztía, de la principal asociación de viñas. Desde 1995, el área con cultivos de vinos se ha duplicado llegando a 100 mil hectáreas. En Argentina el área total se ha mantenido estática.


Quizás la ventaja más importante de Chile es su vocación exportadora. Su red de acuerdos de libre comercio ha ayudado, en parte por la fuerte cobertura de medios (a veces negativa), que se ha generado en los países importadores. Las exportaciones de vino desde Chile a Corea del Sur se elevaron cuando los agricultores hicieron demostraciones contrarias a los acuerdos comerciales. Wines of Chile, un órgano comercial, abrió oficinas cerca de Londres en 2002. Desde entonces, la participación de mercado en Inglaterra (el mayor importador de vinos del mundo) se ha elevado desde un 5% a un 7%, dice Ricardo Letelier, su gerente general. Planean abrir una oficina en EE.UU. y esperan impulsar las exportaciones mundiales a US$ 1.200 millones para 2010.


Chile ha construido una reputación por consistentes vinos a buen precio. Pero su gente de marketing se preocupa de que su habilidad para obtener mejores precios se vea restringida por la ausencia de una imagen de país más clara. "Argentina tiene el tango, Evita y Maradona; Chile no tiene ningún equivalente", dice Patricio Tapia de Wine & Spirits, una revista de NY.


Las exportaciones de vino de ambos países -especialmente de Argentina- tiene potencial para seguir creciendo. Pero no todos los productores prosperarán. En Chile están peleando con una moneda fuerte (el resultado de los altos precios del cobre). Letelier calcula que dentro de los 150 exportadores del país son pocos los que están logrando manejarse con los sobrecostos del momento.


Los productores de vino de Argentina pueden enfrentarse a mayores dolores de cabeza. Las utilidades récord han atraído un flujo de nuevas inversiones. Pero la inflación de 2 dígitos ha hecho que los salarios y los costos de algunas cosas se eleven. José Manuel Ortega, de O. Fournier, una viña española de Mendoza, calcula que los costos de construir una viña se han cuadruplicado en términos de dólar desde 2002. Parte de los futuros obstáculos es un 5% de impuesto a las exportaciones de vino y la ausencia de interés por parte del gobierno en lograr acuerdos de comercio. Eso va a llevar a un remezón: Mendoza por sí sólo tiene más de 800 productores separados. Pero por ahora la innovación y variedad continúan floreciendo a ambos lados de la cordillera de los Andes.
Ver original Vino's Twin Peaks

jueves, 22 de marzo de 2007

¿Teníamos que llegar a esto?

Espejo debe renunciar

El paroxismo de la incompetencia llegó a su punto más álgido con Transantiago y la crisis del transporte que ha desatado, donde la fuerza laboral es la primera víctima. La Alianza derechista sin duda que busca sacar ventajas políticas, pero a su vez cumple con su labor opositora, si bien al defender el "derecho a la vida" creemos que no sólo exagera, sino que el bloque pinochetista tiene poca autoridad moral al respecto.

Lo acertado es defender la libertad de desplazamiento, pero los otros cargos que arguye el bloque opositor nuevamente cae en actitudes circenses que no contribuyen a mitigar los desbarajustes heredados de Lagos.

En lo concreto, Espejo no ha respondido satisfactoriamente ante las inquietudes de los congresistas, y él mismo ha sido un factor decisivo en intensificar el problema. El ministro pudo haber dicho "soluciono el problema en seis meses o me voy", y de esta manera haberse hecho accountable.

O la misma presidenta pudo haber tomado esta medida. Recordemos cuando el gestor de Transantiago, Ricardo Lagos, le dijo a Bachelet: o se acaban las colas en los consultorios en tres meses, o se va. Las colas aumentaron, y la otrora ministra pasó a defensa y de ahí a presidenta. Es decir, ponerle plazos a Espejo no habría solucionado nada pero contribuiría a mejorar la responsabilización del gobierno ante la comunidad.

La actitud de Sebastián Piñera es desafortunada al afirmar que primero hay que solucionar los problemas y después buscar responsabilidades. Espejo es parte del problema, por tanto, para solucionar esta crisis, hay que sacarlo.

Al igual que en Chiledeportes, en esta nueva crisis las cabezas rodarán muy tarde y desgraciadamente las actitudes enérgicas no provendrán de la presidenta. Pero hay algunos matices. Chiledeportes fue robo descarado, mientras que Transantiago es incompetencia pura. Pero ambos tienen en común el factor Lagos, vale decir, una vez más la poco hábil Bachelet debe enfrentar los encargos del gobierno anterior.


Esto se veía venir desde hace mucho pero el "gobierno ciudadano" no se caracteriza por escuchar ni por reaccionar con agilidad ante el descontento popular. La acusación constitucional nos parece acertada y por mientras no queda más que esperar más medidas de parche hasta que el problema se solucione. Esta mula de Transantiago (proyecto "mula" además) se cargó a como dé lugar y se aplicó la política chilenis de "en el camino se arregla la carga".

miércoles, 21 de marzo de 2007

No dan pie con bola













Sin quererlo, en Chile Liberal nos estamos convirtiendo en los declinólogos de la Concertación y nos vemos obligados a insistir sobre la crisis del transporte que causa estragos en la capital, atrofiando la productividad del país debido al aumento del estrés y al mayor grado de angustia en la población.


El panorama es desolador, las estaciones del Metro se han cerrado ante el colapso que ha producido la improvisación y chapucería del gobierno, el presidente del directorio del Metro, Blas Tomic, ha reconocido públicamente que en las horas punta el sistema no resiste y el ministro Espejo anuncia más medidas de parche (típico de la Concertación) con cambios a 73 recorridos, nuevas vías exclusivas, zonas pagas y buses clones. El call center habilitado funciona peor que el sistema mismo. A nivel oficial, se advierten quiebres en el gobierno.

El símbolo más notorio de esta grave crisis es la silbatina contra el otrora ídolo Iván Zamorano, quien ha reaccionado con una carta

El empresario José Yuraseck ha acusado a Blas Tomic de haber renunciado a la empresa Alsacia Express sabiendo del fracaso inminente del Transantiago, y ha culpado al Metro.

Nos parece que todos los encargados de este chascarro mayúsculo deben renunciar a sus cargos, Espejo incluido. Ya sea por la negligencia en la ejecución del sistema, cuyo fracaso es evidente, o por la irresponsabilidad de haber llevado a cabo un sistema que ellos mismos sabían que no iba a funcionar. De no ser así, creo que pronto en estas páginas le exigiremos la renuncia a Michelle Bachelet por el bochornoso año de gobierno en que no ha hecho nada bien.

martes, 20 de marzo de 2007

Chile Invierte: Las 27 medidas de "La Dama"


Medidas de parche

Apenas anunció The Economist que la economía chilena era demasiado virtuosa, el ministro Andrés Velasco se apresuró a declarar frente a la prensa que las cosas en Chile se hacen bien en materia económica.

Pero más allá de lo que haya dicho Velasco, el gesto fue notable. Creo que tenemos a un buen ministro, que sin ser un pragmático como un Hernán Büchi, no ha descendido a los niveles de un Foxley y su Reforma Tributaria. Bachelet y Velasco parecen estar preocupados de los magros resultados logrados y hace una semana Velasco ha anunciado un tercer paquete de medidas destinadas a retomar la senda del crecimiento, extendiendo invitaciones a la Oposición y al empresariado para conformar grupos de trabajo. Un gran gesto que lo distingue de Eyzaguirre, quien siempre hizo oídos sordos de las advertencias que le daban.

Si bien un tercer paquete de medidas muestra la falta de un eje central en la tienda económica, en apariencia la situación parece estable. El mismo Velasco ha anunciado que no habrá alzas de impuestos (contrario a lo pidió el descriteriado de Patricio Aylwin el año pasado, o como otros lunáticos laguistas han insistido esta semana) ni parece dar muestras de necesitar expansiones en el gasto público. De hecho, Jovino Novoa y otros de la Alianza han comentado sobre las buenas relaciones con el encargado de las finanzas de Chile. Sin embargo, estamos de acuerdo con la derecha que este tercer paquete llamado “Chile Invierte”, en apenas en un año de gobierno, demuestra improvisación.

Análisis de las medidas
El punto central ha sido la “depreciación acelerada”, en la que se reconoce como gasto tributario el 50% del valor de los bienes físicos. Las empresas tendrían mayores gastos iniciales y por tanto una menor renta que tributar. En concreto, se reducen impuestos a las nuevas inversiones (al menos hasta diciembre 2008). Se busca que las sociedades puedan contar con mayor liquidez inicial para enfrentar pagos de deudas y evitar intereses. La idea no es mala, pero nos lleva a la esencia misma del asunto, y es determinar hasta qué punto el gobierno busca incentivar a las pymes, o si insiste en favorecer a las grandes empresas. Hasta qué punto el gobierno entiende que este es momento para bajar impuestos, y si lo entiende, desconocemos qué espera para tomar medidas más profundas,

Los gravísimos problemas de burocracia que afectan a nuestro país no son un misterio para nadie, lo que también nos hace preguntarnos porqué recién hoy se nombra a Carlos Mladinic para eliminar los “cuellos de botella” que bloquean las inversiones. La medida se propuso hace cuatro años. Pero beneficia a grandes inversiones, no a las pymes. A éstas se les ha anunciado la creación de un Estatuto Pyme, vale decir, más regulaciones para eliminar la burocracia. Suena paradójico. Habrá que aguardar los resultados que arroje esta medida.

Sin entrar en detalles técnicos, baste contemplar las reacciones para formarnos una imagen global de la situación. Ricardo Escobar, director del SII, afirma que efectivamente se fomenta las inversiones en activos fijos. Esto es correcto. Alfredo Ovalle, titular de la CPC, también se mostró conforme. Vale decir, gobierno y empresariado se encuentran conformes con las medidas.

Pero Iván Vuskovic, vicepresidente de Conapyme, dice que el plan no surtirá efecto alguno. Lo que también es correcto. Porque en vez de facilitarles acceso al crédito, se les da algunas facilidades mediante un aumento en los fondos de CORFO. La medida dejó con gusto a poco.

Otras medidas son perogrulladas. Los descuentos tributarios sobre activos fijos inmovilizados.... ¿por qué no se hizo antes? Se busca además la exención del IVA a la exportación de servicios y eliminación del impuesto de timbres y estampillas. Ídem. A diferencia de la corriente de pensamiento dominante en Chile (socialismo o socialdemocracia), en Chile Liberal creemos que el gobierno debe bajar impuestos siempre, para justamente incentivar la inversión. A fin de cuentas, la economía consiste en eso, en incentivar. El disparate de la administración Lagos de subir el IVA aún no se rectifica, y recordemos que esto hizo para compensar las menor recaudación por la firma de los tratados de libre comercio. Es absurdo que firmemos acuerdos de libre comercio y nos veamos obligados a tributar más.

Si bien es cierto que los nuevos fondos para CORFO significarán más créditos para las pymes, dudamos que el énfasis se haya puesto en este sector. Y es aquí donde se da la batalla contra la pobreza. Persiste la creencia errónea que el capitalismo es una ideología destinada a los grandes mercaderes, y aún no se emplea para mejorar la condición de los más necesitados, de manera que salgan por sí mismos de la pobreza.

Otra medida insuficiente es la propuesta “Un gobierno más ágil”, que asigna más directores independientes a las empresas estatales, como Codelco, y la modernización del Mop. Nos gustaría comenzar a discutir la privatización total de Codelco, tema impensable de discutir en una administración concertacionista. Pero es un gran avance el poner énfasis en la despolitización de reparticiones públicas en vista de los gravísimos incidentes de falta de probidad acaecidos por la nefasta corrupción heredada de la era Lagos.

Hubo otras medidas de menos calibre en cuanto a turismo y energía, pero son tan deslucidas que no merecen comentario. El área energética merece un debate a fondo, por sobre ideologías y partidos políticos, lo que aún no ocurre. El turismo es una inmensa fuente de recursos que no se ha sabido explotar.

Aún faltan medidas que incentiven el empleo, y más aún el empleo con contrato, donde radica la principal falencia de las AFP. Desde un ángulo liberal, buscaríamos crear incentivos mediante la eliminación de la nefasta indemnización por años de servicio, que es un lastre para la bajísima productividad del trabajador chileno, a cambio de una mejora en el sistema de seguros de desempleo (“paro”). Pero este tema lo analizaremos en otra oportunidad.

Podríamos ir mejor
La conclusión que sacamos es que el trabajo de Velasco parece serio y viene acompañado de metas y plazos, por lo que se envía una señal de confianza al público y a los especialistas. El plato fuerte del menú, la depreciación acelerada, va justamente contra las normas aplicadas durante el gobierno de Lagos. Vale decir, parece que el actual ministro tiene la película más clara que su antecesor.

Por mientras, sigue siendo una calamidad la falta de apoyo a las pymes, elemento esencial en la erradicación de la pobreza. Podemos parafrasear a Karol Wojtyła: Las pymes no pueden esperar.

Ver Conapyme está en "estado de alerta" y no descarta movilizaciones

El nuevo modelo de Hollywood

The Economist (traducido por El Mercurio)

¿Cómo el dinero de afuera está cambiando la producción de películas?

A juzgar por el número de ocasiones en que los ganadores del Oscar le agradecieron incansablemente a la gente que financió las películas, se entiende que ellos ahora son más importantes que Dios.
Hoy en día los inversionistas ciertamente son omnipresentes en Tinseltown. Si todo resulta de acuerdo a los planes, muy pronto ellos van a resucitar a United Artists, un estudio obsoleto, y a la carrera de Tom Cruise, una estrella con un problema de imagen pública. Es sólo una señal entre muchas otras de cómo el dinero de afuera de Hollywood está cambiando la industria de las películas.
El riesgo del negocio
Tradicionalmente, los filmes han sido un buen negocio y una mala inversión. La máquina de los sueños se ha aceitado por fuentes tan variadas como los desarrolladores de propiedades, alemanes adversos a los impuestos y la iglesia Baptista (en el caso de la película de 1959 "Plan 9 desde el Espacio"). Pero habitualmente, los retornos han sido poco agradables. El riesgo inherente del negocio del cine es una razón; otra son las prácticas de contabilidad de los estudios que, hasta hace poco, tenían tantos efectos especiales como los de algunas de sus películas.La necesidad de dinero serio ha cambiado todo esto. Los grandes estudios ahora gastan en promedio más de US$ 100 millones en hacer y vender cada película.
Liderados por Disney, están bajando el número de películas que ellos producen, haciendo que las apuestas que toman sean mucho más riesgosas. Los padres corporativos de los estudios estarían felices si sus reportes financieros tuvieran un poquito menos de suspenso. Por ello hay una actitud nueva, más abierta y honesta hacia los capitalistas privados.
Inversionistas en juego
En los últimos años, los grandes estudios han fomentado a los hedge funds y otros inversionistas para que apoyen a más de una docena de películas en un poco más de un año. Aun cuando a los financistas no se les deja meter las manos en películas que obviamente van a ser generadoras de dinero como "Harry Potter" o "Spider-Man", ellos siguen encontrando que las cintas programadas son menos riesgosas, y por ende más atractivas que las películas individuales. En septiembre de 2006, Merrill Lynch estimó que las personas fuera de la industria cubrían más del 30% el costo de una producción de cine.
Un resultado de esto es que Wall Street ahora sabe mucho de cómo funciona el negocio del cine. En la medida en que su experiencia crece, algunos inversionistas han comenzado a pensar que pueden "elegir justo las más rentables", tal como lo señala Johan Burke, un creador de negocios de Hollywood. En vez de apoyar cualquier película que sale del estudio, ellos están invirtiendo en productores con buenos registros. Michael London, quien se especializa en hacer dramas familiares, y Joel Silver, que es notablemente bueno en levantar cosas, están dentro de los últimos que recibieron estos fondos. Se rumorean bastantes otros negocios similares y el ritmo podría crecer si JPMorgan sigue adelante con sus planes de armar un brazo de financiamiento de películas.
Esto ha cambiado el arco de las carreras de Hollywood. No hace mucho tiempo, los productores y las estrellas de cine eran sacados de los estudios por jefes que pensaban retirarse de sus trabajos escribiendo libros que por título llevaran lo siguiente: "Nunca volverás a almorzar en esta ciudad de nuevo". Por estos días les basta rondar a un private equito para volver al trabajo. Gracias a Goldman Sachs, Bob and Harvey Weinstein pudieron establecer un nuevo estudio de cine apenas dos meses después de que abandonaran, el 2005, muy enojados el estudio de Disney.
Tom Cruise y Paula Wagner, su productora, estaban hablando con inversionistas incluso antes de que fueran despedidos por Paramount Pictures el año pasado. MGM, cuyo mayor porcentaje es sostenido por Providence Equity Partners, prontamente le dieron oficinas. Están tratando de levantar alrededor de US$ 500 milones para poder pagar la producción de entre cuatro y seis películas por año. Si el negocio resulta, United Artists, una marca moribunda de propiedad de MGM, volverá a sus raíces de las películas silenciosas en donde los estudios eran manejados por los talentos.
Los independientes
Aun cuando son los grandes nombres los que reciben la mayor parte de la atención, el dinero de Wall Street también se está yendo hacia el cine independiente. Hasta hace poco, los inversionistas estaban nerviosos de negociar con empresas que sólo producían un par de películas por año. Pero los financistas se han dado cuenta de que hay éxitos baratos como "Little Miss Sunshine", que pueden ser altamente rentables, y bajo sus exteriores no tradicionales, ello si están obsesionados con los controles de costo. Jim Stern, un ex administrador de fondos que ha levantado suficiente dinero como para comenzar a producir películas, calcula que se pueden bajar los costos de los grandes estudios haciéndolo entre US$ 20 y US$ 35 millones.
Con eso buscan proteger a los inversionistas vendiendo las películas en el exterior y explotando las rebajas de impuestos ofrecidas por otros estados a los que hacen películas y filman fuera de California. Overture Films, un estudio creado hace cuatro meses, planea seguir una estrategia similar. Evitarán las tarifas altas de los adolescentes (que es cara de publicitar) en favor de películas enfocadas a audiencias más limitadas como los negros o las mujeres jóvenes.
Chris McGurk, que maneja Overture, calcula que tres cuartos de las recién financiadas se irán en cinco años, y puede estar en lo correcto. El problema real de la industria, dice John Sloss, un consultor, no es una escasez de películas, sino que es una escasez de ojos. Llevar películas a la pantalla y a los estantes de DVD, y persuadir a la gente para que las vea, es la parte difícil. En esto los grandes estudios tienen una amplia ventaja: poseen redes globales y legiones de hombres en el área de marketing que pueden poner sus avances de películas entre los éxitos más grandes del momento. El otro problema es que el cine es un negocio impredecible. ¿Quién habría pensado que, por ejemplo, los norteamericanos se gastarían unos US$ 70 millones en apenas tres días de la semana pasada para ver "300", una película pobremente repasada que muestra a un guerrero espartano con acento escocés? Quizás nadie, pero un estudio como Warner, que produjo la película, probablemente tendría mejores posibilidades que un administrador de hedge-fund en conseguir batir las probabilidades. El dinero nuevo está transformando Hollywood, pero la memoria institucional siempre contará en algo.
Los grandes estudios tienen una amplia ventaja: poseen redes globales y legiones de hombres en el área de marketing, que pueden poner sus avances de películas entre los grandes éxitos del momento.

domingo, 18 de marzo de 2007

Continuación: Te lo advertimos, George (y Tony)

CONTINUACIÓN

El factor Tony Blair
Existen los tontos útiles (Aznar) y los tontos inútiles (Bush), pero también existen los inteligentes útiles (Blair), aunque acaban por entregarse al servicio de los tontos inútiles. El primer ministro británico ha sido servil ante los intereses de los neocons, increíble que esto le ocurra en el líder del Partido Laborista, pero lo realmente asombroso es que este abogado bien articulado, astuto y culto se convierta en el perrito poodle de un tejano mal hablado, ex alcohólico y drogadicto, cristiano y derechista recalcitrante.

El tonto útil y el inteligente útil pagaron caro su aventura neoconservadora, el 11 de marzo y el 7 de julio son fechas que madrileños y londinenses no olvidarán. Aznar perdió las elecciones a los pocos días, pero Blair siguió arrastrando a los británicos a una seguidilla de horrores que convirtieron a la otrora “figura inspiracional” en la lucha contra los Conservadores, en el primer ministro más odioso del que los ingleses tengan memoria.

Con las tropas en territorio iraquí, EEUU asignó a Gran Bretaña la zona de Basora, en el sur de Iraq. El esfuerzo británico por ganarse los “corazones y mentes” de los iraquíes se vio recompensado con una estabilidad y calma notables. Los soldados del “ejército al servicio de su majestad” usaban sólo boinas, no cascos, para así mostrarle a la comunidad que ellos son frágiles y que necesitan de la cooperación del pueblo para pacificar la región. Las armas que usaban eran pequeñas y discretas, y las tropas se involucraban en trabajo comunitario tratando de mejorar colegios, centros sociales, procuraban guardar respeto por las mezquitas, y se hacían acompañar en las patrullas por un intérprete que facilitase la comunicación verbal y el intercambio cultural con los civiles.

Todo iba bien pero la insistencia del “perrito poodle” en ponerse a disposición de manera irrestricta a su amo, George W Bush, terminó tirando por la borda todo el esfuerzo y logros alcanzados. El sistema nacional de electricidad aún no funciona con normalidad, gracias a la incompetencia norteamericana, ni tampoco se cuenta con alcantarillados ni suministro de agua. La población local veía a los soldados extranjeros bien alimentados y bien vestidos, mientras que ellos seguían viéndose despojados de su dignidad material. Al menos con Hussein podían tirar la cadena del baño. “¿Qué beneficio me reporta la democracia?”, se preguntaban los iraquíes. En este clima propicio, los insurgentes comenzaron a expandir su radio de acción desde Bagdad, hasta llegar finalmente a Basora.

Los británicos comenzaron a ser odiados, al punto que el general Mike Jackson terminó por declarar que la presencia británica sólo exacerba los ánimos, estimulando a los nativos a organizar cuadrillas de resistencia y a perfeccionarse en guerrilla urbana (quizás el Ché Guevara, si estuviese vivo, habría ido a asistir a los insurgentes).

Pero la cosa se puso color de hormiga en Londres. Los medios de prensa ingleses (que son un verdadero contrapeso al poder oficial) se enteraron que la famosa evidencia de que Saddam Hussein podía organizar un ataque “en 40 minutos” fue exagerada (“sexed up”, el nuevo término acuñado), y los medios terminaron por acusar a un científico tímido y reservado, cuyo nombre apareció publicado en la prensa: David Kelly. El hombre, que siempre supo que el gobierno de Blair exageró deliberadamente el informe, añadiéndole los infames 40 minutos, acabó por no resistir el acoso periodístico y se suicidó. Un informe posterior del juez Hutton determinó responsabilidades en la BBC, cuyo director general fue apartado de su cargo. Se estableció que el gobierno no mintió, pero quedó en tela de juicio la veracidad de los informes de inteligencia. La opinión pública terminó por enfurecerse. Siempre hubo oposición mayoritaria a la guerra, pero ahora se hacía unánime, y todo ocurría mientras la popularidad de Blair bajaba a niveles que harían de Margaret Thatcher una Miss Simpatía.

La política atlanticista que han practicado los británicos desde la II Guerra Mundial había garantizado la resistencia del mundo libre ante el comunismo. Pero hoy es sinónimo de opresión y de ataques demenciales en lugares remotos. La invasión a Iraq y la cárcel de Guantánamo representan todo lo que las fuerzas democráticas no deben hacer. El silencio del primer ministro le daba legitimidad a las fechorías de Bush.

Quizás en su momento Blair pretendió influenciar a Bush, pero éste último es terco e irracional, incapaz de hilar una frase, menos de entender al astuto y agudo líder inglés. Blair terminó tendido a los pies de la Casa Blanca, sin ser capaz de influir un ápice en las decisiones norteamericanas.

Las lecciones que los ingleses aprendieron en Irlanda del Norte se olvidaron en la Guerra contra el terrorismo. Tal como en Ulster, “el libertador inglés” y “garante de la democracia” se convirtió en el odioso opresor, indolente, que exacerba el sectarismo y fomenta el terrorismo y la guerrilla. Iraq es hoy la nueva Irlanda del Norte gracias al primer ministro Tony Blair.

¿Habría sido distinto con Al Gore de presidente?
La política ficción no es constructiva pero no podemos evitar las especulaciones sobre qué habría ocurrido si Exxon y el lobby cristiano no hubiesen hecho de la elección presidencial del 2000 un proceso fraudulento, ilegal e inmoral.

Luego de enterarse del ataque en las torres gemelas, Bush siguió leyendo cuentos infantiles a los niños que él visitaba en una escuela. Luego de 10 preciosos minutos perdidos, la comitiva presidencial perdió más de media hora tratando de encontrar el camino a la Casa Blanca. Una vez informado debidamente de los hechos, la primera reacción de Bush fue advertir: “We’re going to get those folks” (“a estos gallos los vamos a pillar”). Es lícito preguntarse si acaso es George W Bush uno de los hombres más idiotas del mundo. Hay demasiada evidencia que indica que este sujeto es, efectivamente, un tonto de remate.

No así el destacado político y ex vicepresidente durante la administración Clinton, ex candidato presidencial Al Gore. El hombre hoy sonríe al recibir un Oscar por su película “Una verdad inconveniente”, que lo ha elevado a la categoría de ícono en la lucha por la protección del medio ambiente. De intelecto brillante y gran elocuencia, seguramente también habría iniciado acciones bélicas en Afganistán, pero sin la asesoría de los neocons, probablemente se habría involucrado en ofensivas diplomáticas para mantener al secular Iraq fuera del conflicto religioso, habría demostrado competencia al lidiar con Ahmadinejad en Irán, y de seguro no habría alienado a la ONU en su contra.

Es un hecho que jamás habría dicho una brutalidad como “a estos gallos los vamos a pillar”, y con toda seguridad no habría usado el término “Cruzada” al invitar a las naciones occidentales a luchar contra el terrorismo musulmán. Habría sido más prudente al nombrar a su equipo de trabajo. Al contrario de Bush, no habría designado en defensa a un Donald Rumsfeld. Éste último dijo, sobre Iraq que “hay hechos desconocidos que conocemos, hay otros conocidos de desconocemos, pero hay hechos desconocidos que creemos que conocemos pero que desconocemos, y hay otros desconocidos que no sabemos que conocemos”... ni menos aún, Al Gore no habría permitido que su secretario de defensa le dijera a un soldado que se quejaba del pobre equipamiento militar: “usted va a la guerra con el equipamiento que tiene, no con el que le gustaría tener o que puede o no puede tener en un futuro cercano”. Creemos que Al Gore no posee la capacidad de rodearse de idiotas, simplemente porque él es inteligente.

Ni tampoco Al Gore nombraría un John Bolton como embajador de EEUU ante la ONU. Éste tal Bolton fue quien dijo que “si desapareciesen varios pisos de la ONU, nadie se daría cuenta”.

De seguro, en una administración Gore habría muchos desatinos, pero jamás llegarían al nivel atemorizante que hemos visto con George W Bush.

El mundo, un lugar más vulnerable
Lo paradójico es que gracias a la aventura iraquí los dictadores más brutales del mundo viven en plena inmunidad. Mientras Bush hace todo lo posible para perder la guerra en Iraq (y Afganistán), cientos de miles han sido asesinados en Darfur, Sudán, y un millón ha sido desplazado. Pero como ahí no hay petróleo, no importa mucho a Exxon (léase “Casa Blanca”). Corea, por su parte, trabaja arduamente para procurarse armas nucleares y ya casi las tiene. El demente de Kim Il-Jong no titubearía en usar armas nucleares contra Japón o EEUU, o por último, disfrutaría destruyendo lo que sea. Kim aúna en su ser la criminalidad de Hussein elevada al cubo, ¿no era éste un objetivo prioritario, más que Iraq?

Como si fuese poco, Irán se une al grupo y ahora quiere también tener juguetes nucleares. Mahmoud Ahmadinejad, el lunático mandamás de Irán, ha llamado a “borrar Israel de la faz de la tierra” y organizó un concurso de caricaturas sobre el Holocausto. Patético. En Palestina, los terroristas llegaron al poder. Desde el Líbano, lanzan dos rockets a Israel y Ehud Olmert destruye medio país en respuesta. Todo ante la mirada atónita de la comunidad internacional. Nadie hace nada. Más cerca de casa, tenemos que nuestro querido Chávez viaja a cada uno de los anteriores antros de criminalidad a estrechar vínculos. En retribución, Ahmadinejad incluso viajó a Ecuador a la ceremonia de asunción al poder de Correa. El terrorismo se acerca a Chile, y todo ocurre mientras EEUU pierde su tiempo en Iraq.

Propuestas de Chile Liberal
Aplaudimos la nueva ofensiva diplomática de EEUU y la expulsión de Donald Rumsfeld. Pero llamamos al electorado a votar por el partido demócrata de EEUU y por los Liberal Democrats en el Reino Unido. Con las administraciones actuales no hay posibilidad alguna de solucionar el problema en al menos dos décadas. (30 años después del desastre de Vietnam, este país se recupera económicamente. Creemos que solucionar el exabrupto de Bush en Iraq también tardará al menos dos o tres décadas.)

Una vez alejados los gobiernos actuales, la ONU debe involucrar países neutrales en la pacificación de Iraq, donde se necesitan muchas fuerzas de paz. Lo lógico es que éstas tropas lograsen ponerse a disposición de las naciones vecinas, que deben llevar a cabo la reconstrucción de Iraq, y no depender de mandos foráneos que desconocen la cultura y hábitos locales.

En lo contingente hoy, es imperativo el retiro inmediato de todas las fuerzas de ocupación y que se haga presente la diplomacia de distintos países, sin la hegemonía norteamericana. Aún es incomprensible porqué la tercera economía del mundo, Alemania, no cuenta con un poder militar acorde a su estatus democrático, mucho podría aportar Alemania. Respecto al retiro de tropas, es un hecho de público conocimiento que la presencia de las fuerzas de ocupación exacerba los ánimos de la población local, por ello insistimos en su retiro.

Conclusiones
Como hemos visto, la invasión a Iraq ha sido un fracaso absoluto. Se sacó a un dictador del poder, pero dudamos que de las ruinas de Iraq, otrora cuna de la civilización (Mesopotoamia), surja un gobierno democrático. Después de 655 mil muertos probablemente vendrá un baño de sangre mayor en una guerra civil que, como es la costumbre, acabará con un dictador en el poder (y quizás sea una dictadura teocrática).

La democracia occidental no ha triunfado y el fin de la historia sigue latente, pero como destrucción del mundo, no como triunfo de los valores democráticos. Los neocons se dieron vuelta la chaqueta, punto para ellos. Pero el hecho concreto es que la democracia estilo occidental sigue siendo la prerrogativa de unos pocos países (28 naciones, según The Economist; Chile no figura entre ellos)

Los chilenos nos libramos de vernos involucrados en este despropósito al no votar a favor de EEUU. Es decir, hicimos bien en no escuchar (nunca lo hacemos) a Hermógenes Pérez de Arce.

El cambio de régimen nunca fue el objetivo de la invasión y el simple hecho de sacar a Hussein del poder no justifica poner en riesgo la seguridad mundial. Si el objetivo era el cambio de régimen, se podría haber buscado otra solución, no la guerra. Como dijeron los Liberal Democrats en Inglaterra, “la guerra siempre debe ser el último recurso”.

Esperamos que el engaño de Iraq sea correctamente sancionado y que los republicanos y laboristas pierdan la próximas elecciones en sus respectivos países.

Mientras se confabulaba esta brutal invasión, un hombre de intelecto modesto como Jacques Chirac dijo “no hay evidencia suficiente que justifique la guerra”. Francia se declaraba oficialmente contra el belicismo angloamericano. Pero no sólo Francia, sino que la inmensa mayoría de naciones se declaraba en contra. En Londres, un millón de personas salió a las calles a protestar contra la guerra. Los “superamigos” hicieron caso omiso. Hoy vemos las consecuencias nefastas de la obstinación del presidente de EEUU y del primer ministro británico. Conste, que se lo advertimos.