miércoles, 16 de mayo de 2012

El deber hacia la tribu: Lo que faltó en Providencia

El liberalismo avanza, pero no debe olvidar sus raíces

La tribu se prepara para continuar la lucha
El domingo, lamentablemente, Cristóbal Bellolio no fue elegido el candidato para enfrentarse al alcalde incumbente de Providencia en octubre próximo. Desolador, sin duda. Pero para todos quienes llevamos años cultivando el liberalismo, ha sido un momento especial ya que antes jamás logramos ni siquiera meter ruido. La candidatura de Bellolio ha sido la punta de lanza, y el trabajo de Red Liberal ha sido fructífero. Pero así todo, no se logró el objetivo. ¿Qué faltó?

Con no mucha sorpresa me entero en el sitio de Red Liberal que muchos de sus miembros no concurrieron a votar. Cuando vi el debate que organizó el programa Mentiras Verdaderas, de Chilevisión, extrañé una defensa más resoluta de principios liberales de esencia más purista. Al privilegiar la transversalidad, el liberalismo perdió consistencia, y en el deseo de mantener un debate plácido queda la impresión que se abandonó la esencia misma de la filosofía política que cultivamos. Y, peligrosamente, sienta el precedente que el liberalismo es una ideología inasible para el ciudadano de a pie, una escuela de pensamiento que  sólo pulula en oscuros salones de universidades, en los rincones de las terrazas de los cafés, o en círculos acotados. 

El candidato Insulza, el abanderado de la Concertación, habló de reabirir comisarías de Carabineros. La ideología liberal, al servicio del pleno derecho de los vecinos de defender su seguridad, debe ofrecerle al ciudadano la libertad de contratar firmas privadas de seguridad, que remplacen a Carabineros de Chile, y promover lentamente la privatización de la policía estatal. Se perdió la gran oportunidad de demostrar la total incompetencia del alcalde Labbé al administrar una de las comunas más ricas de Chile pero con funestos resultados en cuanto a seguridad ciudadana. Los tres candidatos dieron a entender que se necesita más Carabineros. ¿Por qué no se defienden las libertades civiles privilegiando la seguridad privada? ¿Por qué no se dio un golpe certero a la mediocre administración del señor Labbé? Se perdió un gol cantado.

En segundo lugar, no podemos soslayar que sólo la ganadora dominaba al dedillo los temas municipales, y cómo no, si lleva años trabajando en terreno con la comunidad. Pero esta alcaldía es más que plazas y parques. Cuando el debate entró al terreno de la "alta política", Cristóbal y el candidato socialista se encendieron. Insulza destacó que él fue víctima del exilio, pero por qué el liberalismo no condena tajantemente el hecho vergonzoso que Labbé es un sujeto pagado con dineros públicos, obtenidos mediante la confiscación estatal perpetrada contra los contribuyentes, y que en esa calidad el infame homenaje al criminal convicto Krasnoff, realizado en dependencias municipales, es un atentado imperdonable a la institucionalidad del país y al contribuyente. El liberalismo debe ser el cancerbero de la plata recaudada de los ciudadanos mediante el atraco. Fue desperdiciada una oportunidad valiosa de defender un principio liberal fundamental, quizás por falta de reflexión sobre la naturaleza misma del impuesto.

Un tercer elemento fue la relación entre Calamidad Labbé y los estudiantes, considerando la forma Neanderthal en que se enfrentó el conflicto. La verdad es que Labbé desbarró en la forma. Pero en el fondo, la cuestión debe plantearse de otro modo: alumnos de colegios municipales se "tomaron" escuelas, causaron destrozos evaluados en 400 millones, vandalizaron dependencias, en fin. Es populismo químicamente puro el no condenar estas salvajadas. 

Un alcalde responsable debió primero intentar el diálogo, y segundo, si esto falla, el uso de la fuerza para desalojar y restablecer el orden es plenamente legítimo. Más aún cuando muchos de estos pelusones conculcaron a otros alumnos su derecho a estudiar, o al menos se podía buscar la forma de protestar sin abandonar las clases ni causar daños ni perturbar el año escolar de otros. Pero impedir clases terceros es una acto fascista. Y muchos alumnos fueron unos fascistas. Una cosa es protestar y restarse de las clases, y quizás boicotear de esta manera el año escolar, pero expulsar profesores de las instalaciones y pernoctar en ellas es algo impropio que el liberalismo, como ideología que defiende la libertad individual, no debe tolerar, porque la libertad de muchos estudiantes que sí querían asistir a clases se vio vulnerada gravemente.

Cuando Insulza se declara —orgulloso— un socialdemócrata, pareció dejar a Cristóbal sin piso. Si el liberalismo va a transar de tal modo que termina defendiendo lo mismo que un socialdemócrata, se diluye la esencia misma de nuestra ideología, al final desencantando a la tribu. La política es por esencia la pugna entre libertad e igualdad. Nunca ha convencido a Chile Liberal la nueva tendencia "post-ideológica" en que ambos, libertad e igualdad, acaban confundiéndose. La defensa acérrima y obsesiva de la libertad individual no admite subyugarla ante el igualitarismo. 

Se puede negociar o hacer jugadas tácticas, tal como en el ajedrez uno sacrifica una pieza para avanzar hacia el jaque mate. Esperemos que el extraordinario logro de situar a Red Liberal en el mapa político sea el comienzo para situar a nuestros principios en el mainstream político, y no para claudicar ante la oleada igualitarista que arrecia con tanta fuerza en este último tiempo.

Dicho lo anterior, envío un saludo a los amigos que he hecho en Red Liberal, y al propio Cristóbal, con quien compartimos unas cervezas en París y me dejó la mejor de las impresiones.

6 comentarios:

Anónimo dijo...

Disculpen lo fuera del tema, pero no pueden estar hablando en serio

¿Mitt Romney una opción?

¿El mismo Romney que de joven estudiante se dedicaba a estigmatizar y abusar físicamente de jóvenes homosexuales?

¿El mismo que promete volver a penalizar el aborto y hacer desaparecer instituciones dedicadas a la planificación familiar y la salud femenina?

Ese sería un buen candidato para su “amigo” Crispín, pero nunca para nadie que remotamente aprecie el liberalismo y la dignidad de las personas.
José Fregoso Edelstein

Chile Liberal dijo...

@José: los antecedentes de Mitt Romney muestran en realidad bastante apertura hacia el matrimonio homosexual, especialmente por su oposición a la enmienda que habría prohibido las uniones gay en Massachussets, cuando era gobernador. De hecho, grupos pro-derechos gay lo han apoyado. Lo resume Wikipedia:

When he ran for governor in 2002, Romney declared his opposition to same-sex marriage.[71] "Call me old fashioned, but I don't support gay marriage nor do I support civil union," said Romney in an October 2002 gubernatorial debate. He also voiced support for basic domestic partnership benefits for gay couples. Romney won the endorsement of the Log Cabin Club of Massachusetts, a Republican gay-rights group, who in 2005 accused him of reneging on his 2002 campaign commitment to support some benefits for gay couples.[72] He also opposed an amendment, then before the General Court, that would have banned same-sex marriage and outlawed all domestic partnership benefits for gay couples. When campaigning in 2002, Romney's stated position was that "All citizens deserve equal rights, regardless of their sexual orientation. While he does not support gay marriage, Mitt Romney believes domestic partnership status should be recognized in a way that includes the potential for health benefits and rights of survivorship."[73]

Anónimo dijo...

señores: disculpen el "off topic" pero créanme que vale la pena.

¿Están dispuestos a leer una historia de horror relacionada con este sr. Muñoz? pues entonces yo se las voy a contar, con lujo de detalles. Mi nombre es Nelson, soy homosexual con pareja estable, y desde fines de los 80 e inicios de los 90 tuve la mala fortuna de trabajar junto a este tipo en una repartición pública, en donde, por desgracia, yo era subordinado suyo. En un principio todo estuvo bien, sin ningún problema, hasta que él se enteró, no sé cómo, que yo era gay. Supongo que alguien se lo contó. Ahí recién comenzó mi calvario, pues comenzó a tratarme muy mal, haciéndome comentarios desubicados como “Tú vives en pecado constante, ¿lo sabías?. Arrepiéntete ahora antes que sea demasiado tarde. Dios te ama” y cosas así. Yo lo enfrenté con mucha dignidad diciéndole que no se metiera en mi vida privada y que me dejara en paz. Como no hizo caso e insistió en “redimirme” según él, tuve que hablar con alguien más arriba que lo pusiera en regla. Me dijeron que hablarían con él para que entrara en razón, aunque no me garantizaron nada. Consulté con un abogado y me sugirió demandarlo por acoso laboral, aunque corría el riesgo de que él lo negara todo, cosa en la que este sujeto es un auténtico experto: la negación. Luego, él supo que yo lo había “amarrado” con sus superiores, así que me lo reprochó en duros términos (con groserías incluidas) y a partir de ahí su maltrato hacia mi recrudeció. Me hacía encargos inútiles, me hacía perder el tiempo con labores de chequeo sin ningún fundamento, discutía por discutir, se aferraba a nimiedades para sacarme de mis casillas y no perdía ocasión de machacarme su homofobia con frases de doble sentido. Luego supe que habló con sus superiores directos pidiéndoles derechamente que me echaran, esgrimiendo que “el estado no tiene por qué andar contratando maricones que ensucian la labor pública”. La gota que rebalsó el vaso fue un dia lunes, por la mañana, cuando me mandó a terreno a verificar, nuevamente, unos datos que yo ya había registrado en una carpeta. Le dije que no tenía sentido hacer eso y que no lo haría por ser una vulgar pérdida de tiempo. Se enfureció conmigo y me espetó “Ya huevón, anda y mueve el culito será mejor, mira que en eso tú ya tienes harta práctica, ¿verdad?” Presenté m renuncia en el acto. Y luego supe que este patán hasta celebró mi salida con sus colegas.

Anónimo dijo...

Años después, y justo cuando Pinochet volvió de su “exilio”en Londres, me encontraba yo viendo la TV en casa de mi hermana, justo cuando mostraban escenas en directo desde el aeropuerto de Pudahuel, y cual no sería mi sorpresa cuando, en medio de la multitud, vi al sr. Muñoz blandiendo un letrero de cartulina, escrito con plumón, que decía lo siguiente: “Larga vida al salvador de la patria”, y junto a él se podía ver a varios miembros, ya viejos, del grupúsculo fascista Patria y Libertad apiñados como ovejas lloronas, cantando el himno nacional a todo pulmón. Luego, un ex colega de trabajo me contó que cuando arrestaron al dictador en Inglaterra, el sr. Muñoz viajó a Santiago sólo para agarrarse a trompazos en la calle con los deudos y víctimas de DDHH, cosa que le encantaba, según recuerdo. Me enteré también que golpeó a un corresponsal inglés al que incluso le rompió una cámara Minolta en mil pedazos, y que cuando éste llamó a Carabineros para denunciar el hecho, nuestro hombre lo negó todo, haciéndose el leso y asegurando que todo era una lamentable “confusión” del corresponsal. Claro: ¡cómo la cámara ya estaba rota, se salvó jabonado!
También se dedicó a insultar a las viudas de los desaparecidos, gritándoles: “¡Viejas comunistas, vendepatrias, la sacaron barata, viejas de mierda!” Incluso me dijeron que en un documental televisivo de aquellos dias, (no sé de qué canal) el Sr. Muñoz aparece casi en primer plano, con su rostro deformado por la rabia, mientras lo enfocan casi en primer plano mientras grita desaforado: “¡gracias general Pinochet!, ¡gracias general Pinochet!, ¡gracias general Pinochet!”

Yo ya no le guardo rencor, a pesar de todo el perjuicio que me causó, porque definitivamente no vale la pena como persona. Si acepté mandar este testimonio a este blog fue porque un buen amigo mío se enteró de que este gallo se acordó de mi en una entrada, ¡ faltando a la verdad como de costumbre!. Por eso termino este posteo aclarando lo siguiente: yo jamás me le “insinué” a este troglodita, ni falta que me hacía en todo caso. Fue él quien comenzó a hostigarme por mi orientación sexual, haciéndome la vida imposible. Convirtió mis últimos 2 años de trabajo en un auténtico infierno, hasta que finalmente consiguió lo que quería: mi renuncia indeclinable.


Juzguen ahora ustedes mismos.

NELSON

Chile Liberal dijo...

@Nelson: Sí el sr Muñoz me contó por interno sobre las supuestas insinuaciones de una persona homosexual en su trabajo, aunque me dio el nombre y apellido de aquel colega pero no calza con el tuyo.

En todo caso, ante la gravedad de esta denuncia, voy a "invitar " a Cristian a que se acerque a este blog, ya que debe hacerse cargo de lo que aquí describes.

Chile Liberal dijo...

@Jose Fregoso: idea mía o había acá un comentario tuyo? Lo borraste o desapareció? revisé en spam y no había nada.

Lo pregunto para evitar suspicacias, ya que bastante tuvimos antes con la paranoia de "Amiguín" quien acusaba "censura".